Narrado por Ilaria:
Me encontraba recostada sobre el sillón mientras leía un libro que saqué de la estantería de Ezra, llevo treinta minutos con el y todavía no tengo la menor idea de que trata.
La puerta se abre y aparece Alice de la mano Patrick, él es un hombre bastante guapo, cabello negro y ojos azules, bastante amable y fiestero, perfecto para Alice, detrás de ellos también aparece otro chico de cabello castaño y linda sonrisa
—Hola Ilaria—Me saluda amablemente—Desde que llegaste no habíamos coincidido
—Hola, Patrick—Le extiendo mi mano y él la toma
El otro chico y yo cruzamos miradas y me sonríe
—Mi nombre es Martín—Se presenta
—Ilaria—Le respondo
Ezra hace presencia en la sala y nos saluda a todos, los chicos se quedan conversando un rato en la sala y yo aprovecho para ir a la cocina por un trozo de tarta del día anterior, abro la alacena para intentar alcanzar un vaso, pero está muy alto para mí así que comienzo a saltar para intentar alcanzarlo
—¿No puedes alcanzar la alacena Lili?—pregunta Ezra entre risas a mis espaldas
—¿Quién guarda vasos tan alto?—Respondo con otra pregunta
—Realmente no están altos, tú eres un poco bajita—Me dice
Le doy un suave golpe en el hombro para mostrar mi disgusto
—¡Yo no soy bajita!—Me defiendo
—No, para nada—Contesta sarcástico
Ezra alcanza el vaso y me lo entrega, los dos nos miramos a los ojos sin dejar de sonreír, Ezra acorta la distancia que existía nosotros hasta estar tan juntos que nuestros aromas se mezclaban, su perfume es tan exquisito, completamente fuera de mí me inclino hacia Ezra hasta casi rozar sus labios, pero el ruido de la puerta hace que nos separemos de golpe
¿¡Casi lo beso!?
Ezra bastante desconcertado por la situación abre la puerta y se encuentra con un repartidor de comida, le paga el pedido y luego se dirige a mi
—¿Hamburguesas?, pensé que te gustaba lo que yo cocino—Bromea haciéndose el ofendido
¿Se habrá dado cuenta de mis intenciones al acercarme así?
—Me gustan muchas cosas, sobre todo las hamburguesas—Hago una pausa—Y no te quejes tanto porque pedí una para ti
Alice aparece de la nada con su característica sonrisa y nos mira con atención
—¿Qué hacen?—Pregunta
—Pedí unas hamburguesas—Respondo—¿Quieres una?
Alice niega
—Voy a tomar un par de tragos con los chicos ¿Te nos quieres unir?—Me pregunta
Lo pienso un poco dudosa, pero la verdad es una buena oportunidad para alejarme de Ezra y evitar caer en más tentaciones, la de hace rato estuvo muy cerca de arruinarlo todo y dejarme al descubierto
¡Él debe verme solamente como la amiga de su hija!
—Si claro—Afirmo rápidamente
Volteo a ver a Ezra con disimuló y noto como intenta ocultar una expresión de sorpresa
Alice me jala y me lleva hasta el balcón donde estaban Patrick y Martín conversando muy entretenidos, tomo asiento en el mismo sillón en el que está Martín, pero lo hago un poco alejada de él
—¿Y qué están tomando?—Les cuestiono
—Vodka—Responde Martín mirándome
Alice me sirve un vaso repleto de vodka y me lo extiende
En definitiva no puedo tomarme todo esto
Me uno a su conversación que la verdad no es tan entretenida como me lo esperaba, pero durante toda la tarde pude sentir la mirada de Martín fija en mí haciéndome sentir un poco incómoda, puede que sea un poco guapo, pero eso no vuelve menos incómodo
Las horas pasan y cada vez todo se vuelve más ameno, es eso o que casi termino mi vaso de vodka, si quiera formo parte de la conversación solo me estoy riendo de pensamientos sin sentido
—Hija, ¿Qué van a querer de cenar?—Pregunta Ezra apareciendo en la escena
—No lo sé—Responde—¿Tú que quieres Lili?
No pudo evitar reírme de su pregunta, ¡Ni si quiera dijo nada gracioso! ¿Por qué no puedo dejar de reírme?
Todos voltean a verme divertidos excepto Ezra que me ve preocupado
—Creo que Ilaria ya está muy borracha—Dice en tono de reproche—No deberías permitir que tomase tanto—Regaña a Alice
No puedo evitar reírme de su expresión, se ve enojado, muy enojado, por lo general tiene cara de enojado, pero ahora si parece enojado en serio
—Papi, solo ha tomado un vaso en todo el día, y es el que tiene en la mano—Se defiende
—¿Solo con eso se puso en ese estado?—Vuelve a preguntar
Todos afirman
—Creo que si está un poco mal, lo único que hace es reírse de todo lo que decimos—Hace una pausa—¿Podrías llevarla a su habitación?
Ezra asiente y me ayuda a levantar, al sentir su mano sobre mi cintura mi piel se eriza, su tacto me quema
Me ayuda a llegar hasta mi habitación, pero cuando suelta su agarre me mareo y me caigo al piso
—¿Estás bien?—Pregunta preocupado
—Si te quedas conmigo si estaré bien
No dice nada ante mi comentario y me ayuda a subirme a la cama
—Te voy a quitar los zapatos y la chaqueta—Me avisa
Procede a hacer lo que me dice y al momento de quitarme la chaqueta se acerca tanto que casi puedo besarlo, quiero besarlo, ni si quiera se dé donde estoy sacando la fuerza de voluntad para abstenerme de presionar mis labios con los suyos
—No sé que estoy haciendo—Susurra cerca de mis labios
—Estabas quitándome la chaqueta—Le digo de la forma menos atropellada que puedo
—Hablo de esto, de ti, Lili—Me dice
Soy incapaz de responder algo, mi corazón se comienza a acelerar y el tenerle tan cerca y no poder tocarle me quema
—Eres una niña—Dice intentando autoconvencerse sin hacer nada por separarse de mi
—Si realmente eso sintieras no estuvieras pensando en besarme—Le digo
Él se queda atónito ante mis palabras imprudentes y se separa bruscamente
—Eres amiga de mi hija, podrías ser mi hija—Me dice serio
—Pero no lo soy
Ezra sale de golpe de mi habitación dejándome sola
¿Esto realmente está mal?, ¿Por qué lo estaría?, es solo un hombre divorciado
Un hombre divorciado que es el padre de mi mejor amiga
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El padre de mi mejor amiga
RomanceIlaria es una joven mexicana que el destino, o más bien su mejor amiga llevó a los Ángeles para darle un rumbo nuevo a su vida, más no recibió el giro que buscaba Ceder ante la pasión no siempre es bueno y a Ilaria le tocará aprenderlo a la mala Po...