Amnesia

Ich will es wissen

Capítulo 10.

Conduzco lo más rápido hasta el hospital y estaciono el auto, me quito el cinturón de seguridad, seguido que abro la puerta del auto y salgo disparado, e ingreso al establecimiento, vienen a mi los recuerdos, los gritos, los llantos, pero aparto los pensamientos y me encargo de buscar a una latina pelinegra <<Greteld>>, la veo sentada fuera de una habitación con la cabeza entre sus manos, pensativa y con la mirada ida.

-¿Está bien?-pregunto acercándome y sentándome a su lado.

-Sí... ella y yo estuvimos-hace una pausa para incorporarse y mirarme-estuvimos hablando acerca de su pasado, yo no quería que ella hablara de su mamá porque sabía que eso le iba a afectar-suspira-pero ella no me obedeció y siguió hablándome de ella, intentó recordar a sus hijos, cuando la ví estaba en shock, intenté hablarle y ella solo me dijo que necesitaba ver a sus hijos, y yo no sabía cómo decirle que... que ellos estaban-solloza-estaban muertos-sentí una punzada en el pecho cuando lo dijo-. ella solo me empezó a intentar convencer de que no, que estaban vivos, pero entonces se desvaneció y la tuve que traer de emergencia porque no... no reaccionaba-se limpia las lágrimas al instante que empiezan a salir.

-Desde que Lisnér "murió"-empecé a hablar-decidí irme de Baviera, me fuí a Francia a terminar mis estudios allá y no quise regresar nunca más,-seguí-todo me recordaba a ella y...

-¿Cómo supuestamente murió?-me interrumpió Greteld.

-Yo... estaba tan enamorado de ella, que cuando me dijo que estaba embarazada, yo quise-salió una risita nerviosa de mi boca-, quise pedirle matrimonio, entonces yo ya había preparado toda la propuesta y cómo iba a ser, cuando estuvimos en el carro, un carro se nos atravesó y ella... murió.

-¿Cuántos meses de embarazo tenía Lisnér en ese entonces?-indaga Greteld.

-Tenía siete, sus papás siempre se mostraron disconformes con el embarazo y en si, toda la relación, la relación de fraternidad que llegué a tener alguna vez con el padre de Lisnér, se quebrantó, y nunca más volvimos a hablarnos, desde que los padres de Lisnér se enteraron de su embarazo, la echaron de la casa, y ella empezó a vivir con nosotros, mis padres la trataban como si fuera una hija más, todo iba bien, y después, en un abrir y cerrar de ojos, la arrancaron de mi.-recordar eso me duele, me duele porque pudimos ser muchas cosas y ninguna fuimos, porque ella ya no es la Lisnér risueña de antes, ahora ella vive con pesadillas y tiene que lidiar con sus propios traumas, al igual que yo.

-¿Su mamá alguna vez te amenazó?-pregunta Greteld.
-Sí, muchas veces quiso que me alejara de ella, pero como te habrás dado cuenta, no lo iba a hacer-en ese instante me dí cuenta que un doctor se acercaba y Greteld se levantó de su asiento.
-¿Está bien?-dice Greteld.

-Esta estable, solo tuvo un leve ataque de pánico que no supo cómo controlarlo, pero después de eso, sus signos vitales se encuentran bien y es una chica saludable, pueden pasar a verla.

-Doctor, lo necesitan en la habitación 18-dice una voz proveniente de una enfermera.

-Permiso-dice el doctor y se retira, inmediatamente entro a la habitación de Lisnér y está ahí, está durmiendo tan pacíficamente que me da miedo despertarla, su respiración es suave y pausadamente secuencial, tiene los labios ligeramente entreabiertos, la luz del sol refleja al vidrio de la ventana que hace que su piel se vea más iluminada, tengo ganas de abrazarla y decirle que tuve miedo de perderla otra vez, pero el sonido del celular de Greteld que entró sin darme cuenta, me saca de mis pensamientos, y ella hace un gesto de <<lo siento>>.

-Hola mamá-dice en su idioma natal y sale de la habitación, dirigo mi mirada a la camilla, pero Lisnér ya está despierta y sentada.

-¿Te sientes bien?-pregunto mirándola a los ojos y ella solo asiente.