Gynecology II: Evocación

•| Mujer Amante

- Oh por Dios... Raúl- grito cuando me hace correr por quinta vez en esta noche.

- Te amo Beck.

- Y yo te amo amo a ti Rauw- le digo y le doy un beso para después quedarme recargada en su pecho.

Me quedo pensando en todo lo que a pasado en estos últimos dos mes. Simplemente no lo puedo creer. Todavía no cancelaba la boda con Salomón y eso no era lo peor.

Lo peor de todo, es que me sigo acostando con Raúl. Llevamos un mes siendo amantes y me siento mal por Salomón, pero a la ver soy la mujer mas feliz por que estoy con el hombre que me hace feliz. Pero no se por que no puedo decirle a Salomón que lo nuestro se acabo. Todavía recuerdo la primera vez que intente cancelar la boda.

Unos días antes.

- Salo, tenemos que hablar.

- Claro linda, pero antes te tengo un sorpresa.

- Eso puede esperar lo que te tengo que decir es importante- digo pero no me hace caso y se va a la cocina de su casa dejándome sola.

- Mira quien vino a conocer a mi futura esposa- me dice y me doy la vuelta- Beck, cariño te presento a mi abuela.

- Hola querida mucho gusto- me dice la adorable señora mayor- tenia tantas ganas de conocerte, eres muy linda querida. Mi pequeño definitivamente se saco la lotería contigo- me dice y yo solo le sonrió.

- Gracias, es un gusto conocerla al fin Salo me habla mucho de usted- nos damos las manos y ahora nos sentamos en el sillón.

- Beck, mi abuela vino desde Canadá para conocerte y para la boda- se me estruja mi corazón de pollo que tengo y me siento culpable por lo que le iba a decir antes- pero bueno dime cariño ¿Que es lo que me querías decir??.

- Yo...- tartamudee no podía decirle que cancelaría la boda enfrente de su abuela que había venido desde Canadá - no era nada importante, después te digo.

Después de eso durante todo el mes intente decirle pero siempre ocurría algo o alguien nos interrumpía y yo lo dejaba para después, pues no quería decírselo así de repente. No quería lastimarlo el siempre fue bueno conmigo y por eso no quiero que sufra.

- Princesa, ¿Ya le dijiste a Salomón?- me pregunto Rauw sacándome de mis pensamientos.

- Aún no amor, pero te prometo que lo hare pronto- subo mi mirada para ver esos ojos color marrón que me encantan.

- Date prisa, solo faltan dos meses para la boda y no quiero que te cases con él - me dice un poco triste. No me gusta verlo triste así que subo mi cara y le doy un gran beso. 

- Lo haré pronto, lo prometo.