París - Francia
Raúl
El hermoso París, la ciudad del amor. Por fin había llegado después de unas horas de vuelo. Lo primero que hice fue buscar un hotel. Descansaría esa noche. Y a primera hora del día de mañana iría a cada universidad que se encuentre en este lugar. Mi esperanza de encontrarla estaba intacta, solo espero tener suerte.
Los pensamientos invaden mi mente justo antes de dormirme, pienso en ella... En mi Beck, en la razón por la cual se fue, en la razón por la cual decidió marcharse de mi lado para siempre. Pienso en mi bebe, ¿Estará muy grande? ¿Beck le hablara sobre mi?. Se siente tan bien cuando pienso en ellas. Tengo una hija y no se como es, no se si se parece a mi o a Beck, Espero que se parezca a su mamá, seria la niña mas hermosa de todo el universo. Agradezco mil veces a Jefnier, el fue quien me dijo que había sido una hermosa niña ... Darcy, mi pequeña Darcy.
Los rayos del sol no tardaron mucho tiempo en aparecer por mi ventana, me levante solo tome un poco de café y comí un par de galletas. Baje hasta la recepción y pregunte a la mujer que se encontraba allí por las universidades que se encontraban mas cerca al hotel, ella amablemente me dio el nombre de las tres, que se encontraba mas cerca. Así que me encamino a la primera universidad. Con la esperanza de que esa sea la correcta.
Pues para mi mala suerte no fue así. Voy a la segunda y obtengo la misma respuesta. Dicen que la tercera es la vencida, pero esta vez tampoco fue así. Me tarde todo el día buscando esas tres universidades a las cuales Beck no asistía. Regrese al hotel y por internet busque todas las universidades de parís.
Mi rostro se desfiguro por completo al ver el enorme listado. Sentí mis esperanzas caer al suelo de una forma inmediata. Pero eso no me detendrá buscaría en cada una de las universidades, debo recuperar a mi familia.
Beck
- Beck cariño, ¿Por que no salimos a dar una vuelta? Al parque que esta cerca de aquí.- me pregunta Salomón- Podemos llevar a Darcy para que se entretenga un rato también.- Claro - sonreí. - Iré a cambiarla.
Una vez que cambie a Darcy, la pongo en su coche. Y los tres nos dirigimos al parque.
Pasamos parte de la tarde ahí. Gracias a Dios hoy descanse en el trabajo, gracias a eso pude estar con mi princesa todo el día.
Íbamos caminando hacia los columpios para jugar un rato con Darcy, quien estaba muy juguetona desde hace horas.
Me siento en el columpio con ella, mientas Salomón va por unos helados. Mientras esperábamos por los helados, comencé a moverme en el columpio, mientras veía como Darcy aplaudía y ría.
Mi vista se fija en una persona en particular en todo el parque, alguien que a simple vista se me hacia bastante familiar. Me bajo del columpio con Darcy aun en mis brazos y camino solo un poco para ver mas de cerca a aquella persona.
Un escalofrió recorrió por completo todo mi cuerpo, mi piel se erizo, mi corazón estaba a mil por hora. ¿Cómo era posible? ¿Por que estaba él aquí?. Dios estaba mas atractivo de lo normal. Solo se veía un poco mayor, pero solo eso.
- ¡Llegaron los helados!. - Dijo salomón, un poco fuerte haciendo que de un saltito en mi propio sitio.- Delicioso. - Sonreí fingidamente, mirando nuevamente a donde Raúl se encontraba.
- ¿Estas bien? Estas algo pálida. - Dijo preocupado.
- De maravilla. - Volví a sonreí- ¿Podemos irnos?-
- Pero recién llegamos, ¿ Paso algo?. - Pregunto nuevamente.
- Solo vámonos rápido de aquí ¿Si?- le suplico y sin decir mas nos vamos de inmediato del parque. Pido por que Raúl me haya visto.
La mayoría se preguntan sobre quien es Salomón. Se trata de Salomón Villada Hoyos, conocido como Feid.
Así es mis bebes, nuestra queridísima y tonta Beck, esta jugando con el corazoncito de nuestro Feid.
*Carita triste*
ESTÁS LEYENDO
Gynecology II: Evocación
Fanfiction¿Cuanto puedes amar a alguien? ¿Cuantas cosas puedes perdonar? solo por mantener a esa persona que tanto amas a tu lado. Beck había decidido continuar su vida, lejos de Rauw, pero. ¿Sería capaz de vivir sin él?. Adaptación.