Extra.

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Dani:

Escuchar hablar a Mochi se estaba convirtiendo en una de mis actividades favoritas, sin embargo, no me gustaba verla mal. Y hablar de ciertos temas la ponía sensible. Así que cuando note que ella necesitaba un poco de contención le pase una mano sobre los hombros para abrazarla y acariciar su cabello. Eso es lo que hacía yo con mi hermana cuando ella necesitaba llorar y eso la calmaba, por eso supuse que a Mochi le pasaría lo mismo. 

Después de un rato conversando me di cuenta de que se había aligerado el ambiente un poco, pero aún así no quite mis manos de ella, me gustaba abrazarla. 

—Ahora, no me gusta esto de que almuerces sola, me voy a quedar contigo. —Le dije dejando en claro que no me iba a mover del lugar. 

—Está bien. —Dijo ella apoyando su cabeza en mi hombro haciendo que se acercara aún más. 

Sentí todos mis músculos tensarse. No es que no me agradara el contacto físico, solo que no me lo esperaba. Ella no solía acercarse a mí. 

Nos quedamos unos minutos quietos, sin movernos del lugar temiendo arruinar lo que sea que estuviéramos teniendo. 

Entonces me incliné un poco de lado para verla mejor, era tan preciosa. Me encantaba la forma en que su cabello rubio, casi blanco de tan claro que era, caía a los lados de su cara haciéndola lucir demasiado tierna. 

Veo como ella se voltea para mirarme, era aún más linda con su cara de sorpresa debido a la cercanía que teníamos. Seguramente ni se había dado cuenta de que estaba un poco sonrojada.  

Instintivamente baje la mirada de sus ojos a sus labios rosados, era algo que también me gustaba de ella parecían tan suaves. Cuando me di cuenta de que estaba perdiendo el enfoque dirijo mi vista nuevamente a sus ojos. 

Pero entonces hace algo que no me esperaba para nada, se acerca un poco más a mi. ¿Acaso ella quería...? 

La verdadera pregunta era ¿Yo lo quería? 

Decidí acercarme un poco más a ella y cierta intimidad se formó entre nosotros. Estábamos tan cerca que temía que ella pudiera escuchar los latidos de mi descontrolado corazón. Podía sentir su aliento sobre mi rostro, nuestras narices se rozaban. 

Estaba a punto de eliminar el pequeño espacio que quedaba entre nosotros cuando un sonido me hace saltar para atrás y alejarme. 

Era mi móvil sonando, anunciando una llamada entrante. Me alejé un poco más, confuso e irritado, para poder sacar el aparato del bolsillo y ver quien era el responsable de haber detenido ese gran momento. 

Delfi. No estaba seguro de si debía matarla al llegar a casa o agradecerle por haber interrumpido la escena que estábamos montando Mochi y yo. 

.....

Nota de la autora: ¡Hola pastelitos (eso suena ridículo)! ¿Cómo están? Les traigo este extra antes del capítulo de hoy.

¿Qué les pareció la perspectiva de Dan sobre lo que pasó?

Estoy muy emocionada por los próximos capítulos, ya quiero subirlos!!!

Espero que les haya gustado, si es así no se olviden de votar y compartir la historia...

Nos vemos en el próximo capítulo pastelitos, bye bye :*

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