𝘖𝘤𝘩𝘰 𝘤𝘪𝘵𝘢𝘴 •° 𝙼𝚒𝚗𝚌𝚑𝚊𝚗/𝙷𝚢𝚞𝚗𝚑𝚘 °•

06: DESPUÉS DE LA TORMENTA

Minho no podía caminar puesto debía cargar las bolsas y al mismo tiempo tomar a los niños de las manos, ya recordaba por qué no iba de compras.

Ante la situación dejo que Felix y Jisung se adelantarán cargando solo las bolsas pequeñas, mientras que él sostenía las más pesadas y al bebé en la cangurera, pensó que caería antes de llegar al auto, sin embargo, de forma repentina como si fuera una ayuda enviada por el destino, un joven se ofreció a cargar todo.

—Permítame ayudarlo con esto—hablo el muchacho apresurándose a sostener las bolsas.

—Muchas gracias—soltó Minho tomando un respiro mientras miraba como las venas del brazo ajeno se marcaban cuando enfocaba fuerza en sostener las bolsas. —Es este—soltó el pelinaranja apretando el botón perteneciente a las llaves del automóvil.

El musculoso llevaba una gorra negra, una playera suelta del mismo tono, un pants negro y tenis oscuros; toda la ropa que portaba se ajustaba a su cuerpo de una forma bastante atractiva. La cochera se abrió permitiéndole al joven colocar las bolsas dentro; los niños se pararon a un lado de Minho mirando curiosos al muchacho.

—Papi, ¿es tu amigo? —interrogó Jisung

—Es un joven amable que se ofreció a ayudar, suban al auto—ordenó al tiempo que el chico terminaba de acomodar las compras; los infantes se limitaron a subir al carro.

—No tuve oportunidad de presentarme antes, probablemente no me recuerde—soltó el rubio quitándose la gorra; Minho quedó boquiabierto al ver de quién se trataba, sin duda era el mismo chico que había visto en el ascensor hace unos días.

—Ah, es usted qué casualidad—sonrió dulcemente el pelinaranja al mirar al musculoso acomodarse el cabello.

—Mi nombre es Christopher, pero puede decirme Chris, es un placer Minho—formuló el más alto con una sonrisa representativa de un adolescente avergonzado.

—Chris, perfecto no lo olvidaré— sonrió

—¿Cambio de look? —interrogó Chris impactado por la nueva apariencia del mayor.

—Ya era hora de un cambio—Lee soltó una risita ahogada sin percatarse de como el joven lo observaba, como si lo estuviera apreciando.

—Le va muy bien, aunque también lucía excelente con su tono anterior, por favor no lo tome a mal—comentó Chris bajando la mirada apenado.

Lee se agachó halagado por el comentario, recordando repentinamente como Hyunjin siempre le resaltaba el hecho de que lucía cansado o estresado, a pesar de que en ocasiones se retocaba el tinte o se arreglaba, el comentario siempre era el mismo, en fin, era solo un halago.

—Gracias Chris—sonrió tontamente el pelinaranja mientras cerraba la puerta trasera. —¿Vas al gimnasio del centro? —interrogó el mayor mirando la vestimenta del rubio.