La última semana la había pasado de la casa a la preparatoria, de la preparatoria al hospital y de nuevo a casa. Aunque la lesión de Patrick no fue grave, mamá decidió que era mejor que se quedará en observación, pese a que su estadía costara una fortuna.
- ¡Alis! - el sonido de los libros sobre la mesa acompañaron el chillido.
- Rayos Misti - La cabeza me daba vueltas, no había dormido bien en esos días con tanto albedrío.
- ¿Cómo está él ? ¿ Ya le darán de alta? ... ¿Ya quiere verme?- Esas últimas palabras fueron acompañadas de una pequeña lágrima.
- Bien, no, y pues... - Mordí mi labio inferior al ver que su cabeza se escondía entre sus brazos, sobre la mesa - Misti, no eres solo tú el tampoco quiere...
- ¡Voy a matar a Brandon Olsen! - Misti levantó la cabeza, tomó los libros y salió corriendo.
Traté de seguirle el paso, pero pese a que yo andaba en zapatillas y ella en tacones no logré hacerlo.
- ¡Ey, Ey! ¿ A dónde vas? Alis... - Su voz se perdía mientras avanzaba.
- Te explico luego - Apenas logré decir.
Corrí por dos cuadras, pero perdí el aliento por lo que me detuve, saqué el teléfono para llamar a Brandon sin tener suerte.
- Intento salvarte el cuello ¿por qué no contestas!
- Un segundo - Estaba agitado, al parecer él había intentado alcanzarme - ¿Desde cuándo eres tan rápida?
- Pues... - Lo golpeé con el hombro al avanzar hacia quién hasta hace unos segundos me ignoraba - ¿Qué haces aquí?
- Hola... Alis ... Colbert - Su sonrisa y mirada no perdía el encanto, pese a su palidez.
- ¿Qué te pasó? - Al estar frente a él pude ver mejor los tono violetas sobre su rostro.
- ¿Sabías que tu hermano fue dado de alta?- Su risa se ahogó en un quejido.
- ¿Patrick? No tenía idea, espera haré una llamada.
Mientras avanzamos hablé con mi madre, quien confirmó lo que Brandon había dicho.
Caminamos hasta llegar a la enfermería.
- Estoy bien, solo fue unos cuantos... ¡Ay! - Su quejido me dio algo de gracia y preocupación.
- Ya está- Linda sonrió - Bien iré a traer el formulario.
Linda salió de la habitación, nos sin antes guiñar con complicidad, lo cual hizo algo incomoda la situación.
- Ahora sí , explícame ¿Qué pasó?- crucé los brazos para acreditar mi seriedad.
- Pues estaba en el baño, cuando Patrick entró y me tomó por sorpresa, al inicio hablamos pero cuando le dije...
- Espera se lo dijiste - Lo golpee con el puño en el hombro.
- ¡Joder! No ves que estoy herido - Su quejido fue un tanto infantil.
- Habíamos quedado en que dejaríamos que pase un tiempo para decírselo, lo arruinaste y sabes que me alegro que te halla aniquilado. - Estaba roja de furia.
- Lo siento, pero sentí que ya no le podía seguir ocultando las cosas - Bajó de la camilla y se puso enfrente de mí - Además por ocultarlo tanto tiempo fue que el término en el hospital.
- Bien, punto a tu favor, pero ¿y ahora?, Las cosas de por sí ya estaban tensas - No podía evitar la histeria.
- Tranquila conozco a Patrick y sé que en unos días ya nos habrá perdonado, sé que ahora no me crees, pero esta vez será distinto. - apretó con ternura mi mejilla provocando más enrojecimiento en ellas.
- Bien, aquí está, llena esto por favor - Linda me observó una vez más con complicidad.
- ¿ Esto es todo? - Su mirada seductora me inquietaba.
- Sí, ya pueden irse - Linda tomó la tablilla y nos señaló la salida.
Ambos salimos, no sin antes verificar que no hubiesen conocidos cerca.
Di un corto suspiro, intentando tranquilizar mis sentidos, buscando la mejor opción para un nuevo plan.
- Te extraño tanto - Brandon dejó de seguirme, giré para verlo, al ya no escuchar sus pasos; él estaba quieto observándome con algo de nostalgia, con sus manos en los bolsillos del pantalón. En unos instantes se acercó a mí, tomó mi mano y acaricio de nuevo mi rostro.
- ¿ Recuerdas cuando nos vimos por primera vez? - Su voz parecía perderse entre mi silencio y mis recuerdos.
INICIO DEL FLASHBACK
Llegué temprano, se había cancelado la última clase, la casa estaba en completo silencio por lo que fui a la cocina en búsqueda de alguna nota de mamá.
- Regresamos pronto, el almuerzo esta en el refrigerador, coman juntos, besos de mamá y papá - Leí con voz chillona intentando imitar a mamá.
Copito de acercó a mí con pequeños ladridos - Bien creo que seremos solo las dos por ahora - Sabía que Patrick tenía entrenamiento, así que subí a mi habitación a tomar una ducha mientras esperaba que llegara.
Puse algo de música y enseguida entre a la ducha; ese día había sido muy cálido y el uniforme definitivamente no había sido mi aliado.
Al salir de la ducha, me envolví en la toalla y apague la música.
- ¿Copito? - Mi pequeño amigo siempre salía a mi encuentro pero aquella vez no fue así.
Sentí un frío penetrante, pero luego el calor volvió a mí al escuchar el sonido de su cascabel
- ¡E y! allí estabas - el empezó a rodearme con pequeños brincos, sacándome una sonrisa.
Saque del armario algo cómodo para ponerme, que en mi mundo eran un short y una sudadera.
- ¿Copito?¿ Dónde están tú y y tu tintineante cascabel? - El silencio volvía la situación más inquietante.
Salí del cuarto al ver la puerta entre abierta, busque por el pasillo, pero no lo encontraba, a lo largo de unos segundos eternos, escuché un pequeño quejido que provenía de la habitación de Patrick, era mi pequeño amigo asfixiándose.
No sabía que hacer, por instinto cogí a mi pequeño Copito entre mis brazos y bajé las escaleras.
- ¡Patrick! - El sonido de la puerta de la cochera me dio algo de alivio - ¡ Patrick! ¡Ven! ¡ Ayúdame!
Mis lagrimas caían al ver como mi gran amigo se iba desvaneciendo en mis brazo, intenté apretar su estómago pero no logré que dejara de ahogarse.
- Por favor reacciona, no te duermas Copito, por favor, te necesito conmigo ... Maldición ¡Patrick!
Grité y grité, pero él no aparecía - ¿ Qué haces? - Se había acercado, tomando a Copito entre sus brazos - Suéltalo, lo lastimas - No dejó que me acercara, mi desesperación aumentó hasta que oí el chillido de mi bello amigo, había recobrado la conciencia.
- ¿ Qué pasó?- El inútil de mi hermano al fin apareció.
- ¡Dónde rayos estabas! - Lo empujé con fuerza, la calma se volvió ira, lo golpeé una y otra vez hasta ahogarme en un profundo sollozo - Maldición Patrick, copito casi muere y tú no aparecías.
- Lo siento me demore en ... Cómo que casi muere - Patrick mostraba confusión ante la situación.
FIN DE FLASHBACK
Lo miré como aquella primera tarde, perdida ante sus ojos y sin aliento, con una sola palabra entre los labios, aunque esta vez con un sentimiento distinto.
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LO QUE JAMAS DIJIMOS
Teen FictionLa noche había sido larga, la primera del año, algunos habían bebido mucho pero no tanto como ella. - Joder ya pareces mi madre - Sus pasos eran poco coordinados - ¿Ya te dije que te quiero mucho? - Sí, sí ya cállate que nos van a oir - La senté en...