CONSTANTE [+18]

VEINTIDOS - NOÉ

CAPÍTULO VEINTIDOS

NOÉ.

One, don't pick up the phone
You know he's only calling
Because he's drunk and alone
Two, don't let him in
You'll have to kick him out again
Three, don't be his friend
You know you're going to wake up
In his bed in the morning
And if you're under him
You ain't getting over him

NEW RULES - DUA LIPA. 

Tanta gente, tanta euforia, tanto grito, sentía que mi cuerpo era el hogar de un sinfín de constelaciones que se movían impacientes dentro de mí. Sentí mi garganta desgarrarse en cada nota, en cada letra de cada maldita canción. Alexina brilló, la batería y el teclado sonaron tan bien... Y Luke desplegó todo su encanto guiñándoles el ojo a un grupito de chicas que ya lo habían escaneado por completo.

Cuando sentía que las cuerdas vocales iban a pedirme parar con todo, conectaba miradas con Ares que estaba muy cerquita del escenario. Lo vi gritar eufórico y agitar sus manos. Pensé en lo sexy que se veía así... Al lado de él, William alternaba la mirada entre nosotros y Charlie, completamente embelesado por la segunda. Al menos alguna vez en la vida alguien nos debería mirar así.

Cuando sonó el último solo de bajo, cuando Cook bombeó el último platillo, hubo gritos por doquier. Habíamos gustado... No. Habíamos encantado. El público rompió en aplausos cuando nombré uno a uno.

–¡Y ella es Louisana! –Alexina cerró nuestro show presentándome a mí. Nada quedaba de la chica que hacía horas estaba tirada en su cama hecha un ovillo con miedo a salir al mundo. Saludamos a todos con las manos hasta que desaparecimos por completo.

Cook me abrazó y me sacudió. Estaba completamente transpirado y yo seguramente también pero nada me importaba. Lo habíamos logrado a pesar de los mil inconvenientes que tuvimos en el medio. Ni siquiera pensé en Noé en ningún momento del show. Nada. Me limité a disfrutar por completo la presentación.

–¡Te besaría en este maldito instante! –Gritó apenas mis pies tocaron el piso y nos separamos.

–Mejor no lo hagas, amigo. –La voz de Ares sonó a mis espaldas.

Mi amigo alzó sus manos en señal de paz. –Toda tuya, jefe.

Volteé a verlo y me lancé a sus brazos. –¡Estoy tan eufórica! –Dije mientras sentía como apretaba mi cuerpo contra el suyo.

–Lo hiciste muy bien, amor. Muy bien. –De nuevo la palabra amor saliendo de sus labios. Mi cuerpo estaba tan receptivo que vibró en un escalofrío. Él besó mi cuello mientras yo intentaba regular mi respiración y tranquilizarme.

–¡Necesito un tequila!

Sentí su risa en mi cuello, ahí donde tenía posado sus labios. –¿Segura? ¿Un tequila?

Asentí. –O dos.

Se separó de mi agarrando mis manos. –Vamos por esos tequilas.

En el camino nos cruzamos a Diego y sus amigos y juntos fuimos a buscar con qué festejar. El primer tequila pasó como si fuese agua. El segundo, sí golpeó bastante.

–Chicas, tómenselo con calma. –Advirtió William divertido.

Charlie no le prestó atención y llamó a la hermana de Ares que miraba a todos lados con cara de pánico mientras Luke lidiaba con un grupo histérica de mujeres. –Alexina, ¡ven!

–Ah no, Charlotte. Ni se te ocurra. –El tono de voz de Ares era completamente serio y se complementaba a la perfección con su ceja arqueada. Golpeé su brazo reprendiéndolo.