CONSTANTE [+18]

TRES - PENE ARES Y PENE WILLIAM

CAPÍTUO TRES

PENE-ARES Y PENE-WILLIAM.

I kissed a girl and I liked it
The taste of her cherry chapstick
I kissed a girl just to try it
I hope my boyfriend don't mind it
It felt so wrong
It felt so right
Don't mean I'm in love tonight

I KISSED A GIRL - KATY PERRY

–Puedo cubrir tu turno hoy. Da parte de enferma, Prince.

Me estaba colocando los rollers en ese momento. Los meseros, entre los que nos encontrábamos Luke y yo, teníamos la obligación de andar en rollers por todo el local tomando los pedidos. Fue muy gracioso aprender a usarlos y la historia de mi primer día es bastante humillante y divertida en partes iguales. Luke realmente no necesitaba el trabajo, en absoluto. No porque tuviese dinero por doquier o porque su abuela fuera una viuda estanciera. Pero en el pequeño centro donde vivía con ella, estaba todo cubierto y de la pensión de la abuela Cora sobraba un pequeño fondo que Luke y ella ahorraban para que él pudiese tener, en sus palabras, un buen futuro por "si no funcionaba lo de la banda". Aunque, según ella, éramos un grupo de jóvenes con mucho talento.

Cora, quizá, fue nuestra primera fan.

Pero Luke siempre sintió la necesidad de ayudarme, apoyarme y acompañarme a pesar de las veces que yo le dije que no era necesario, que podía arreglármelas sola aunque nunca era cierto. Y cada fin de mes, casi como un ritual y sin que yo se lo pidiese, él me daba la mitad de su paga. Luke era el mejor amigo que cualquier persona hubiese deseado tener.

Dejé caer mi cabeza en su hombro.

–Sólo son un par de horas, Luke, sólo un par de horas.

La tarde estaba pasando tranquila, sin sobresaltos. Con Luke estábamos a quince minutos de terminar nuestro turno y poder irnos a casa. Hasta que ellos llegaron.

William M. y Ares S. se hicieron presentes en el local.

¿Escuché realmente a la gente aguantando la respiración? ¿O fue solo mi imaginación? Mi cerebro ya no procesaba nada, absolutamente nada.

Crucé miradas con Luke y con un asentimiento de cabeza me hizo saber que él se ocuparía.

Luke, el héroe.

Los segundos y minutos parecían no avanzar. Sentí un murmullo bajo detrás de mí.

–Ella está ocupada, yo los atenderé –escuché la voz de Luke.

A medida que me acercaba a Luke, que con su cuerpo tapaba al de los otros dos chicos, la conversación se parecía más a una discusión. Temiendo que mi amigo perdiera los estribos, llegué a su lado poniendo una mano en su hombro. Digamos que la paciencia no era una de las muchas cualidades de Luke.

–¿Qué sucede? –pregunté. Ni siquiera intenté fingir una sonrisa. Ni tenía ganas ni se la merecían.

William fue quien respondió.

–Resulta que no queremos que nos atienda él, queremos que nos atiendas tú ¿Es necesario que hablemos con el dueño?

Sentí como los músculos de Luke se tensaban debajo de mi tacto. Veo la sonrisa de William, de no haber nunca roto un plato en su vida, y el intento del otro engendro de reprimir una risa.

–Ve Luke, los atiendo y nos vamos, ¿sí?

Mi amigo me miró con sus ojos de una forma extremadamente intensa. Finalmente desistió, asintió y desapareció de mi vista.