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¿Cómo demonios llegué a mi casa?

Me pongo a leer la nota que dice lo siguiente:

"Querida Sam,

Anoche cuando te abracé te desmayaste, no despertaste e Ian me dijo que te trajese a casa, resulta que colapsaste y del desmayo parece que pasaste a dormir así que no me preocupé por llevarte al hospital. Me tomé el atrevimiento de dormir aquí en tu mueble ya que eran las 3 am y tenía sueño, ni loco me iba por la carretera en el estado en el que estaba, te he preparado el desayuno. Capaz para cuando leas esto yo esté en el restaurante por la llegada de nueva comida y la preparación de las alacenas, no creo volver exactamente temprano para ver como sigues así que te dejé desayuno (por favor aliméntate). Disfruta del desayuno y espero que hayas descansado.

Con cariño, Andrés.

P.D: Por favor, cuida más de ti

P.D 2: Pensé que tu casa estaría en peores condiciones, excepto por tu alacena vacía, todo está muy bien para ser tu sola. Estoy orgulloso de eso.

P. D 3: Todas tus pertenencias se han quedado en tu casillero, no las he podido sacar porque no tenía como, tendrás que pasar por ahí más tarde"

¡QUÉ VERGÜENZA! ¿Cómo que me he desmayado en sus brazos? Va a pensar que soy una niñata que no sabe cuidar de sí (aunque capaz y no está tan alejado de la realidad), maldita sea, como lo que preparó y voy corriendo a la universidad, mis cosas pueden esperar, solo tengo mi teléfono, llaves y cartera y por ahí solo me comunico con 3 personas y dos de ellas ya saben que no tengo mi teléfono, por suerte al trabajo solo llevo lo necesario y dejo mis tarjetas en casa, ya que he escuchado que las tarjetas son lo más fácil de perder. Mi identificación no la tengo, pero no creo que la necesite hoy.

Me toca pedir un taxi desde el teléfono directo de mi casa porque no tengo chance, la clase empieza a las 2 y ya es la 1:15 pm. El taxi llega y le pido que vaya un poco rápido ya que no tengo tiempo y la uni no me queda muy cerca que digamos, ¡ah! De paso nos toca hacer una parada para retirar dinero ya que no cargo efectivo.

Llegamos a la 1:50 pm y le doy mil gracias al taxista quien me ve con una risa burlona, salgo como alma que lleva al diablo y veo que aun Nini no sale, voy a una de las máquinas expendedoras y me compro un chocolate y me siento en una de las áreas verdes bajo un árbol a esperar a la susodicha que aparece unos minutos, bastantes largo a mi parecer, después. Veo una pulga de no mas de 1,55 corriendo a mi dirección vestida con un estilo Indie enfocado en el amarillo y marrón (no sabía que podría verse bien, pero lo supo combinar, la envidio).

¿sabían que las pulgas gritan? ¿No? Pues yo tampoco, pero esta si y solo viene diciendo a los cuatro vientos: MALDITA, ¿DONDE COJONES METISTE TU INEXISTENTE TRASERO? ¿POR QUÉ NO ME HAS CONTESTADO NI HABÍAS DADO SEÑALES DE VIDA? (es una pulga loro, solo grita eso varias veces mientras se acerca, habla más rápido de lo que se mueve si soy honesta), como me desespero guardo la mitad del chocolate, me levanto y corro a donde ella.

- Querida, eres muy lenta, pero te perdono, ¿Cómo estás?

Y casi me caigo de culo.

Ustedes se preguntaran, Samantha ¿Cómo casi te caes de culo?, y mi respuesta es: Nini. La pulga se me abalanzó encima en un abrazo que obvio correspondí, pero teniendo en cuenta que soy un palillo y vivo de las tienditas cerca de las paradas de autobús, dulces y cosas basura, no estaba preparada para ese abrazo de oso con impulso.

- Pensé que lo habías intentado otra vez, no sabes lo feliz que estoy de verte, pero necesito una explicación ahora mismo. – levanta la cara de mi pecho y veo que está llorando- No vuelvas a hacer eso.

Finding my wayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora