Mistake|| CHAELISA

12

Lisa's pov.

Estábamos en camino a la casa de los padres de Rosé. Ella iba a hablar con ellos para decirles sobre nuestra relación. Mientras íbamos llegando pudimos ver autos de policías estacionados en frente de la casa de los Park.

-¿Que es esto?- Dijo Rosé bajándose del auto y dirigiéndose a su casa.

-No puede pasar señorita- Dijo un policía parándose en frente de ella.

Llegué a su lado y le tomé la mano.

-Es la casa de mis padres, ¿que pasó?- Preguntó.

-Obtuvimos una orden de allanamiento por parte del señor Byun- El padre de Baekhyun.

En ese momento el padre de Rosé salió de la casa esposado mientras dos policías lo sostenían de los brazos.

-Suéltenme imbeciles- Dijo removiéndose. Su mirada se dirigió a la chica parada a mi lado y su rostro decayó-. Rosé, esperen, déjenme hablar con mi hija, por favor.

Los policías frenaron y lo trajeron hacia donde estábamos nosotras.

-¿Dónde está mamá, papá? ¿Qué es todo esto?-Preguntó mi novia.

-Lo siento mucho, mi amor- Dijo-. Siento haberte privado de tu felicidad y haberte mentido con lo del matrimonio.

-¿Que? Papá no entiendo- Dijo.

-Siempre estuve en contra de tu relación con ella- Dijo mirándome-. Así que planeé un falso contrato para que te casaras con Baekhyun- Confesó y mi corazón se aceleró-. Quería que te casaras con él para alejarte de Lisa y qué fueras normal- Levanté la ceja ante ese último comentario.

Miré a Rosé y pude ver las lágrimas cayendo por su rostro.

-Señor Park, se le acabó el tiempo- Dictó el policía y se lo llevaron a la patrulla.

Abracé a Rosé y dejé que llorara lo que necesitara llorar. Si esto me había caído como un balde de agua fría a mí, a ella peor. Se separó de mi y sacó su celular.

-¿Quieres que nos vayamos?- Pregunté.

Negó-. Necesito saber dónde esta mi mamá- Dijo y se llevó el celular a la oreja-. Mamá, ¿dónde estas? Se llevaron a papá- Dijo y se secó las lágrimas-. Esta bien, ya voy- Colgó-. ¿Me puedes llevar a la comisaría?- Preguntó y asentí.

Nos subimos al auto y partimos a la comisaría. De vez en cuando la miraba, pero ella parecía estar maquinando miles de cosas en su cabeza por lo que no hablé en todo el camino. Llegamos y la frené antes de que se bajara.

-¿Quieres ir sola o quieres que te acompañe?- Pregunté.

-Ven conmigo- Dijo.

Asentí y bajamos del auto. Rodeé el mismo y tomé la mano de mi novia, quien sonrió nerviosa. Entramos a la comisaría y la mamá de Rosé se levantó para abrazar a su hija. Me miró y también me abrazó tomándome por sorpresa.

-Gracias por estar aquí con ella- Me sonrió.

Le sonreí de vuelta y el señor Byun apareció. Pude notar como Rosé se tensó y se acercó más a mí. Sabía que no era miedo, sino que era más rabia que otra cosa. Lo saludó educadamente y este sonrió levemente.

-Tu padre será interrogado, y depende de lo que diga se dictará si lo llevamos a juicio o no- Dijo el hombre con voz grave.

-¿Usted fue quien ordenó la orden de allanamiento?- Preguntó Rosé directa.

-Hay muchas cosas que no sabes, Rosé, yo no soy el malo aquí- Dijo el señor Byun.

-Sé que usted no es el malo, pero quiero saber aquello que no se- Dijo.

-Te lo explicaré mas adelante, me tengo que ir, Baekhyun está esperándome fuera- Dijo y se fue.

La mamá de Rosé había estado callada en toda la conversación, cosa que me pareció extraña y cosa que no pasó desapercibida para mi novia.

-Iré a buscar algo para comer- Dije y me fui de ahí, sabía que le tenía que dar su espacio para que hablara con su mamá. Salí de la comisaría y vi a Baekhyun afuera hablando con su padre. No le tenía rencor ni odio, seguía siendo mi amigo de la infancia después de todo. Me dirigí a la tienda que había al lado de la comisaría y compré algunos snacks para mi novia. Volví y Baekhyun estaba ahora solo fumando un cigarrillo.

-¿Liberando estrés?- Pregunté.

Soltó el humo por la boca-. Algo así, ¿quieres uno?- Dijo ofreciéndome uno. Negué. Le extendí una bolsa de papas fritas y él agradeció.

-Esto es una mierda- Dijo-. No pensé que el señor Park fuera así.

-Yo tampoco, pero no me extraña- Dije-. Esperaba algo más sutil, como que viniera a mí y me obligara a alejarme de ella o algo así, no esto.

-Ese hombre es una caja de sorpresas para nada agradables- Dijo y tiro el cigarrillo al suelo para pisarlo-. Ahora solo queda esperar a que confiese.

Nuestra conversación culminó ahí y volvimos adentro. Pude ver como Rosé y su madre discutían. Pude notar en temblor en el cuerpo de mi chica y como las venas del cuello y los brazos se le marcaban por la rabia. Su madre lloraba y sabía que algo había salido a la luz, algo nada bueno.