Gracias a Ricky he podido pasar unos días tranquilita descansando y aprovechando para ver a mis amigos. He podido recuperar las horas de sueño y he reorganizado mi apartamento montando por fin esa estantería de Ikea que llevaba en su caja y escondida detrás de una puerta desde que la compré.
Estoy descansada y con energías para empezar las grabaciones.
Tras pasar la mañana rematando la decoración de casa y comer con tranquilidad, el coche del programa ha pasado a buscarme y ya estoy llegando a plató.
Entro rápidamente, pues Ricky ya me está llamando porque llego unos minutos tarde. Me lo encuentro en el camerino, sentado esperando.
-Mimi, tía.
-Perdón, perdón, me he entretenido recogiendo la casa.- digo dándole un beso en la mejilla para que me perdone.
-Venga, que te tienes que cambiar.- dice metiéndome prisas para que me cambie.
Ya tengo la ropa seleccionada desde la semana pasada. Así que cojo la percha y entro a cambiarme. Una vez lista, Ricky vuelve con Cristo, que me peina.
-Vamos a maqui, que tengo allí las cosas.- me indica mi maquillador y uno de mis mejores amigos.
Él sale y yo me entretengo un poco en el camerino. Después salgo al pasillo. Llego a la zona común que conecta los dos pasillos: el de camerinos y el de maquillaje, peluquería y estilismo. Veo a Miriam haciéndose una foto en el espejo y me mira a través de él.
-Qué guapa.- digo al pasar a su lado y ella se gira levemente para mirarme de frente.
-Gracias.- sonríe, y yo me voy hacia maqui porque ya me he entretenido bastante.
Me siento algo ridícula por unos segundos al haber hecho ese comentario, pero luego lo dejo pasar, porque la chica es guapa y seguro que se lo dice todo el mundo.
Entro a maquillaje y Cristo ya ha preparado las cosas. Me siento y en menos de quince minutos estoy lista, y eso que no he parado de hablar y cantar dificultándole el trabajo a mi amigo, pero él ya está acostumbrado.
Empieza la grabación.
-Wow.- dice Rafa al verme en el backstage mientras esperamos a que Miriam nos de paso.- Estás divina.- yo me echo el pelo hacia atrás cual diva y él se ríe.
Miriam empieza a presentarnos y Miguel es el primero en salir.
-¡Lola Índigo!- se oye a Miriam. La regidora me da paso y yo entro a plató bailando y saludando al público. Reconozco un par de caras conocidas entre la gente y después me coloco en mi sitio para esperar a Rafa.
Mientras entra, todo el mundo le aplaude, y yo aprovecho para mirar a la presentadora, que aplaude también al son de la música.
El programa se me pasa volando. A la mayoría de bailarines que pasan por el escenario los conozco de clases, actuaciones, competiciones o redes sociales, así que me emociona verlos aquí esta noche. Me emociono y me divierto a partes iguales, y también saco un poco mi garra para defenderme entre mis dos compañeros.
Finalmente me decido por Macarena: una bailaora súper talentosa y expresiva que nos ha llegado a todos.
Bajamos al escenario para felicitar a los concursantes que han pasado y finalizar la grabación.
-Enhorabuena, preciosa.- digo abrazando a la integrante de mi equipo.
-Gracias, Lola, de verdad.- me dice emocionada.
-Gracias a ti, tenías que estar en alguno de los equipos y he sido la más rápida.- Miguel Ángel se ríe y viene también a felicitarla.
-Me la has robado.- se queja.
-¡Ah! Haber estado más listo.- digo chula y luego riendo.
El director indica que hemos terminado y yo voy rápidamente a mi camerino porque tengo que ir al baño. Cuando salgo, me cambio y cojo mi teléfono.
