NARRA HUGO
*Tres meses después*
Todo marcha bien, Eva está ya de 5 meses y todas y cada una de las ecografías que tenemos están colgadas en la nevera junto a las de Area. Mi pequeña, sus celos crecían y era inevitable que todos los días no hubiera una rabieta por su parte, nosotros intentábamos calmarla pero nada funcionaba.
-Princesa, despierta, hay que ir al cole.- La mezo suavemente para que se despierte. -Venga mi amor, levanta o llegarás tarde.- Pero mis intentos son nulos. - Area, no querrás que venga mamá y te levante de mala manera enfadada, ¿verdad?- Entonces si se mueve, gira sobre las sábanas y me mira medio adormecida.
-Pero papi, yo quiero dormir un ratito más.-
-Ya lo sé corazón, pero tienes que ir al cole y ver a tus amiguitos o no quieres verlos?- Le pregunto para intentar activarla.
-Sí pero tengo sueño.- Sus manos destapan su cuerpo sin ganas.
-Venga, no quieras que venga mamá y te haga levantarte a las malas.- Advierto del posible suceso.
Y es que ya llevaban unos días levantándose las dos de mal humos por culpa de que Area no quería levantarse, y no miento si digo que lo hace por los celos y así poder llamar la atención.
-Area hazme el favor de levantarte ya o juro que vas al colegio en pijama.- Y ahí aparecía Eva enfadada.
-Ya se estaba levantando cariño.-
-La quiero abajo en 5 minutos.- Dice dándose la vuelta y bajando las escaleras.
-Ya viste lo que pasa, la próxima vez me haces caso desde el principio y no se arma este jaleo, ahora baja a desayunar y después te aseo.- Un día más que añadir a la lista de "empezamos el día mal".
Ella baja las escaleras enfadada y con una expresión triste dibujada en su rostro.
-Siéntate y desayuna.- Le ordena Eva.
-Eva mi amor, ¿puedes venir un momento al salón?- Ella asiente y viene conmigo. -Cariño no seas tan extricta con ella, no hizo nada malo, tiene cinco años.-
-No la defiendas Hugo, lleva unos días que los celos se apoderan de ella y no voy a permitir que llegue tarde a la escuela o que me conteste como me contesta, porque solo lo hace conmigo.- Sus ojos se aguan. -Estoy cansada y ella no para de hacerme sentir culpable sobre tener otro bebé.- Y entonces se rompe.
-Ey, mi amor, no llores, en cuanto llegue de la escuela hablamos con ella, pero tienes que tener un poco de paciencia cuando pasan esas cosas, ella se estaba levantando cuando tú viniste y le dijiste de mala manera que se levantase y cuando a bajado a desayunar le has hablado igual de duro que le hablas cuando hace algo muy malo y está vez no hizo nada.- Le acaricio la mejilla y retiro sus lágrimas. -Ahora vamos a darle un abrazo para que se vaya al cole feliz, y se que tú también necesitas ese abrazo.- Ella asiente y me abraza, dejo un beso en su cabeza y otro en sus labios.
Cuando llegamos a la cocina ella está jugando con las galletas de dinosaurios.
Eva se acerca a Area y le da un beso en la cabeza.-Lo siento mi princesa, tu hermanito se despertó hoy rudo y las pagué contigo, perdoname preciosa.- Le dice acariciando su espalda y dándole besos en la cabecita.
-No pasa nada mami, ¿puedo darle un beso a pasita? Así se duerme otra vez.- Pregunta levantando la cabeza para mirarla a los ojos.
-Claro que sí mi vida.- Ella se levanta la camiseta y Área le da unos cuantos besos en la tripa ya bastante abultada. -Y ahora al cole, en venir papá y yo tenemos que hablar contigo.- Le dice rodeando la isla y sentándose en el asiento de enfrente.
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Contigo Hasta El Cielo
RomanceHugo, un muchacho que se dedica a robar carteras e incluso algún que otro accesorio. Y Eva, una chica que vende drogas desde muy joven. ¿Que pasará para que se conozcan? ¿Existe el destino o simplemente es casualidad?