¿Qué sucedió después de la carta enviada por Terry tras la muerte de Susana?
Todos los detalles que muchas fans queríamos saber de su reencuentro y que quedaron en la sombra aun después del último libro.
Es una historia sin fines de lucro y la may...
Salieron de esta sala y pasaron a la siguiente donde encontraron un piano de cola. Ambos se miraron a los ojos y sin pensarlo se dirigieron hacia él, levantaron la tapa y se sentaron uno al lado del otro.
–– Como en los viejos tiempos en Escocia. ¿recuerdas Pecosa? –– Le preguntó Terry.
–– Cómo olvidarlo si fueron días maravillosos –– respondió Candy.
Terry inicio la melodía "Cuna de Mozart".
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––¡Ven sígueme! yo con una mano y tú con la otra –– le dijo Terry animándola a acompañarlo. Ambos tocaron la melodía añorando sus días en Escocia.
–– Mmmmm –– murmuró Candy. –– Quiero preguntarte algo Terry... ¿Por qué no me volviste a besar después del festival de mayo? Yo realmente esperaba que me besaras ¿sabes?, y más aún en nuestras clases de piano –– dijo fingiendo sentirse ofendida.
Terry la miró fijamente entrecerrando los ojos y exageró una reacción de asombro.
–– ¿Qué no recuerdas que me golpeaste furiosamente, Pecosa! –– le argumentó –– Yo era un pobre muchacho que intentaba hacerte saber mis sentimientos, si te robé un beso de una manera poco amable no fue por falta de amor, si no por no poder controlar esos celos que me cegaban cuando me comparaste con tu querido Anthony. Yo estaba abriéndote mi corazón ¿y que recibí a cambio? Una furiosa bofetada, que me sacó de mi mundo de ensueño y me regresó a mundo cruel...–– Lo dijo dramatizando –– Si querías otro beso, tu tenías que haber dado el primer paso pecosa, yo también tenía mi orgullo, ¿no crees.?
Candy se quedó sin argumentos, mientras Terry la miraba divertido...
–– ¿En verdad querías tanto que te bese, Candy? –– Le preguntó Terry susurrándole a milímetros de su boca en actitud provocante, para luego alejarse y dejar a Candy sonrojada y con un nudo en la garganta.
Candy solo asintió. Él sonreía con un gesto divertido.
–– ¡Lo sabía! –– dijo Terry con una expresión de victoria.
–– ¡Eres un presumido!!! –– expresó Candy–– levantándose del asiento y dirigiéndose a la ventana.
–– Vamos Candy, no te enojes, solo estoy bromeando. ¡Ya me conoces! Ven aquí por favor siéntate a mi lado. –– Terry se levantó del asiento y jaló a Candy para sentase nuevamente junto a él. –– Si quieres que te sea sincero yo moría también por besarte, y no solo eso, soñaba con desnudarte y hacerte mía sobre aquel piano en escocia, ...no sabes todas las ideas que puede tener un adolescente.
