Terry llegó al hotel, Candy y Dorory estaban dormidas, él entró muy despacio a la habitación tratando de no despertarlas. Observó a Candy con ternura, era hermoso contemplarla dormida. Se acerco a ella y le dio un tierno beso.
Candy despertó –– Terry!! ¿Dónde has estado? –– preguntó.
–– Shhhh –– dijo Terry poniendo un dedo es su boca. –– No hagas ruido o despertarás a Doroty. Solo quería asegurarme que estabas dormida. Ya me voy, te dejaré descansar, mañana hablamos.
–– Ni lo sueñes, Terence –– respondió Candy saltando de la cama. –– Tendrás que contarme que pasó ahora o no podré dormir. Vamos a charlar a fuera para no despertar a Doroty.
Ambos salieron a la sala contigua de las habitaciones.
––¿A dónde has ido? –– preguntó Candy un poco angustiada. ––¿Qué ha pasado? ¿por qué no quisiste contarme?
–– No te preocupes mi amor, ya todo ha pasado, no vale la pena que te preocupes.
Candy tomó de la mano a Terry para acariciarlo, notando su evidente inflamación.
–– ¿Que ha pasado con tus manos? –– le preguntó Candy preocupada. –– Están todas inflamadas. ¿Qué has hecho?
–– Cálmate Candy, solo es cosa de hombres, ya no me preguntes más. –– Dijo Terry tratando de ocultar sus manos
–– ¡Terence Granchester!! –– alzó la voz Candy. –– No voy a permitir que me mantengas ajena a tus problemas, no pretendas que solo esté a tu lado en los buenos momentos. ¿Cómo podemos iniciar así una relación, basada en mentiras y desconfianza?
––¡Cálmate Pecosa!, bueno, bueno, tienes razón, te lo diré –– dijo Terry –– Pero solo si me prometes no molestarte conmigo.
–– La cuenta pendiente era con el cobarde de Neal Leagan –– soltó Terry.
–– ¿Queee? –– Dijo Candy –– Terry, ¿Qué has hecho?
––¡Solo le he dado su merecido y una clara advertencia para que no se le ocurra acercarse a ti nuevamente! –– gruñó Terry.
––¿Y tú estás bien?, ¿no te ha hecho algún daño? –– se afligió Candy poniéndose a revisarlo de pies a cabeza.
–– Si me ha hecho algo malo, me arrugó el traje, jajaja. –– dijo Terry riendo divertido.
–– ¡No es gracioso Terence!, te pudieron lastimar, ese Neal no es un sujeto en el que se pueda confiar, es astuto y vil, y no anda solo. ¿Cómo pudiste arriesgarte así?, me moriría si algo te pasa, ya te lo he dicho, ¡no vuelvas a arriesgarte de ese modo! –– Decía Candy con los ojos inundados de lágrimas.
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Candy Candy El Reencuentro (Candy y Terry)
Roman d'amour¿Qué sucedió después de la carta enviada por Terry tras la muerte de Susana? Todos los detalles que muchas fans queríamos saber de su reencuentro y que quedaron en la sombra aun después del último libro. Es una historia sin fines de lucro y la may...