Capítulo 19

136 16 1
                                    

No puedo comprenderlo, no obtuve respuestas de mi padre, pero conseguí algo mucho mejor, la espada. Pero por un momento me sentí bien, pude sentir como toda la oscuridad se profundizó en mí, fue como si....

-Fueras una sombra...

Esas voces en mi cabeza se escuchan de nuevo, son detestables.

-¿Qué es lo que quieren de mí?- Les pregunto, pero no escucho respuesta, supongo que hablan cuando se les da la gana, ahora hay un silencio.

Han pasado minutos y he salido totalmente del reino, pero no se tardarán en darse cuenta que la espada ya no esta en su lugar, así que debo moverme rápido, por suerte aún tengo un caballo de transporte, pero todo no acaba ahí.

En mi mente, hay una imagen, un templo, no cualquier templo, el lugar donde alguna vez forjé mi espada, así que ya sé la ubicacion de mi siguiente objetivo.

Cabalgo en mi caballo, sé que en algun punto alguien irá vendrá a buscarme por robo a uno de los grandes dioses, pero tampoco es como si me importase siquiera un poco, las voces me guían al templo, lo raro es que ya conozco su ubicación.

Aun recuerdo la forma en el que la conseguí, había estado urgando en algunos castillos de corruptos, hasta que me encontré a un hechizero, tuvimos un encuentro poco amigable, al haber derrotado a ese viejo, me confesó un secrete con tal que no lo asesinara, unos templos en áreas clausuradas, muy protegidas, tuve que armar un escándalo entre bandidos, no fue díficil, pero ahora no sé si vaya haber más seguridad en esa área.

Tardo casi dos días en llegar al templo, pasé por varias cosas, nieve, desiertos, bosques con nidos de goblins cerca, pero finalmente he vuelto a donde todo comenzó, pero al llegar lo único que encuentro son soldados muertos, esto me pone alerta, ya que sé que no estoy solo, pues a juzgar por su apariencia, podría decir que fueron asesinados recientemente y sin embargo, vuelvo a escuchar las voces.

-Sigue tu camino....

¿Qué camino? No sé si quieren que haga algo, no entiendo bien, no les cuesta nada ser más específicos, hago más veloces mis pasos para poder llegar lo más rápido posible, doy varios saltos para escalar el templo y encontrar el gran hoyo de este para poder entrar, segundos después logro entrar a lo que alguna vez fue un enorme templo que flotaba por los aires.

Pero se ven manchas de sangre, estas son recientes, así que sigo mi paso, pero ya no camino, me pongo a correr hasta el origen del rastro de sangre, pero entonces llego hasta este.

Alguien me esta esperando, alguien cae ahí, una mujer, no puedo ver su rostro, esta cubierto por un casco, este tiene unas alas a los lados, no se ve peligrosa, su armadura ni siquiera cubre todo su cuerpo, tampoco la mía lo hace pero yo soy algo distinto y ella no.

-¿Por qué me sigues?- Pregunta ella.

Coloco mi mano en mi espada, debo estar listo para desenfundarla antes que ella, pero contesto su respuesta.

-¿Qué haces aquí? Esta restringida la zona.

Ella se acerca y pone su mano en su espada, también se prepara para esto.

-Vete o muere.- Contesta ella.

Supongo que no se puede evitar lo inevitable, ambos corremos para acercarnos y luchar, desenfundamos nuestras espadas y las hacemos chocar, puedo ver las chispas viajar en el aire, sus ataques son muy rápidos, lo que no sabe es que yo tengo una habilidad especial.

Doy un gran salto para tomar distancio y entierro mi espada al suelo provocando un pulso que la lanza a una pared, corro lo más rápido posible y entierro mi espada a lado de su cabeza.

Goblin Slayer: LeyendaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora