Bebé -DabiShiga-

8.

-No quiero ir....

-Pues no vallas... Y dejame ir solo... Como si fuera un maldito viudo o divorciado embarazado...

-¿Qué?...

-Iré... Con o sin ti...

-Oh vamos Shigaraki.... No...

-Si, si y si... Voy a ir... Y tu ni nadie va a detenerme...

-Se que no puedo detenerte...

-¿¡¿Y AUN ASÍ ME VAS A DEJAR IR SOLO?!?!

-Pues..

-ERES UN MAL ESPOSO!!..

-¿Qué?... Eh estado cuidándote tres meses... No... Mentira... Siempre te eh cuidado..¡¡¿ Y ahora me sales con que soy un mal esposo por no querer ir a la casa de tu padre....?!!.

-DEJA DE GRITARME DABI!!

-Shiggy... Ni siquiera te estoy gritando...

Hoy era un viernes por la tarde, la mañana había pasado con normalidad y tranquilidad, hasta que el de cabello claro dijo que tenían que alistarse para ir a la casa de sus padres para darles la noticia de que estaban por tener un hijo, ahí todo se descontrolo, el mayor decía no querer ir, y el menor empezó a decir los puntos a favor del por qué era necesario ir a aquella casa, todo con calma y sin presión, eso hasta que al embarazado le dio una ataque de cambios emocionales, resultado del mismo embarazo.

-¿Sabes qué Tomura?

-¿Qué? - preguntó en forma de puchero.

-No voy a ir... Y tú no sabes manejar y los transportes públicos están estancados... No hay forma de que vallas.

-Claro que la hay... No vallas esta bien... No importa tu estúpida presencia... El transporte público puede seguir atorado por mi bien... Y creo que hoy es un buen momento para enseñarme a manejar...

-No, la última vez que lo intentaste casi nos matas a ambos...

-Bueno... No creo que te importe si muero al tratar de manejar... No quieres llevarme... Como sea... Iré... Estoy listo..

-Shiggy... Recuerda que estas en cinta... No puedes solo tomar el auto...

-Entonces me iré caminando... Que importa si me secuestran.. A nadie le importo... Ni siquiera a mi supuesto esposo... Me largo..

-Shiggy... No digas eso... Sabes muy bien que no podría vivir sin ti... Y si te pasara algo no podría perdonarmelo...

-¿Entonces me llevaras?...

-Si... Si lo are...

Y fue asi como nuevamente el de ojos rojos ganó la batalla, convenció a su marido, ahora tenía transporte y chófer.

El camino hacia aquella casa de buen ver y de familia bien reconocida por sus alrededores fue silencioso por parte del de cabello oscuro y llena de conversación por parte del menor.

Al estar frente al hogar de los Shimura ambos bajaron con tranquilidad y fueron hasta la puerta de esta donde tocaron repetidas veces hasta escuchar un "En un momento"

El menor estaba ansioso, y cuando abrieron la puerta se encontró con su hermana, aquella que no veía desde hace tres años atrás, al verse, ambos hermanos guardaron silencio y dieron un grito de felicidad abrazándose al instante, el mayor solo sonrió al ver la escena, le parecía algo maravilloso el ver como su amado sonreía y desbordaba felicidad al estar con su hermana.

-No puedo creer que estés aquí.... Estoy muy feliz... Tenko.. Te extrañe mucho....

-Claro... Yo también te extrañé... Pero tenía que volver... Te hice una promesa..