You, I, We. |Liam Payne.

Capitulo #1 - "Vuelo"

- NOAH! - Escuchaba una voz gritando y a la vez despertando mi dormir.

Me desespérese con lentitud tratando de abrir mis pesados parpados mañaneros, definitivamente me encanta dormir. Por fin pude abrir mis ojos y volver a la realidad después de mi ¿extraño sueño?, la primera persona a la que vi: mi hermosa madre con su cabello cortó color negro y ojos oscuros como la noche.

- Hija, rápido!, tenemos que llegar temprano al aeropuerto - dijo mi madre señalando una maleta grande que por cierto, empaque anoche.

De pronto lo recordé, ¿cómo se me pudo olvidar aquello?, entre en mi baño rápidamente para después lavarme la cara y verme al espejo para razonar.

El día de hoy mi vida cambiara en 180°, será tal vez la última vez que toque estas paredes de mi acogedor cuarto, no me quiero imaginar cómo extrañare a mi madre, a mis amigas, a mis amigos, a mi escuela, a mi ciudad, A MI VIDA ACTUAL.

Mis padres se divorciaron cuando yo tenía tan solo 5 años, fue un cambio brusco para mi dejar de ver a papá desde ese entonces, siempre me he comunicado con él por teléfono pero soy una de las personas que piensan: hablar por teléfono con una persona no es lo mismo que poder verla, abrazarla, tocarla, olerla, etc... Por esa razón en este momento estaba por dar un paso a un "cambio brusco" más, sentí que ya había vivido mucho tiempo con mi madre y quizá era tiempo de vivir con mi padre.

Entre en la ducha para darme un baño corto pero suficiente para esta mañana tan fría. Salí del baño con una toalla rodeando mi cuerpo para luego colocarme la ropa que elegí para viajar desde la noche anterior.

Salí de mi habitación para luego ir a la cocina, salude nuevamente a mi madre quien hacia un desayuno que con verlo daba hambre, en serio que extrañare eso.

- El vuelo sale a las siete - dijo mi madre mirando su reloj.

- Que?? - dije asombrada - ¡Pero si son las cuatro de la madrugada, madre! - continúe.

- Siempre la puntualidad, Noah - dijo.

- Aggg - dije. - No extrañare eso - pensé.

- Además sabes que New york es grande!, el aeropuerto no queda a tan solo dar un paso! - dijo mi madre dando razones.

- Bueno, eso es cierto - dije rendida.

- Ok, tienes media hora para retocarte y cuando pasen esos minutos te espero en el carro - dijo decidida mi madre.

- Ok - respondí ante su propuesta.

No lo puedo creer, tan solo tengo media hora más para despedirme de mi casi antigua casa. Entre en mi habitación para luego, frente al espejo comenzar a darme unos retoques con maquillaje en mi rostro y luego con un peine a mi largo cabello negro azulado.

Me tire por última vez en mi cama, para poder ver toda mi habitación en detalle, ya estaba vacía, solo quedaban algunos muebles que luego los darán a caridad, aunque mi madre promete que si algún día vuelvo ella tendrá nuevamente hecha una habitación aquí.

Comencé a abrir mi closet, los cajones, los gabinetes y toda clase de cajas para asegurarme que no faltaba nada por empacar hasta que recordé mi colección de libros, ¡como los pude olvidar!, tal vez este viaje me tenía tan desconcertada que no me acorde de revisar la sala de estudio.

Salí nuevamente de mi habitación para ir a la sala de estudio y como lo pensé, ahí estaban en mi repisa vintage favorita.

- Le diré a mi madre que mande esta repisa, no sé como pero me la tiene que mandar - pensé.

Agarre un maletín algo grande y comencé a meter todos los libros que alcanzaran, vi que aún quedaba un pequeño hueco en donde meter más cosas entonces vino a mi mente una grandiosa idea: llevemos videojuegos.