Hace 1 semana.
—¡Que bonito collar, Verónica! ¿Dónde lo compraste? —dijo una estudiante enfrente del espejo al lado de ella.
Estaba escondida dentro del baño escuchándolas sin querer. No lo hacía por curiosidad, ni mucho menos por miedo, simplemente porque tanto yo como ellas dos no nos llevábamos muy bien. Preferimos mejor mantener nuestra distancia para no crear un ambiente lleno de tensión.
Verónica siempre suele desviar su camino con una expresión de asco en cuanto me mira, mientras yo reacciono girando mis ojos dando a entender que no me importaba.
En este caso me encontraba de pie oculta esperando que la par de amigas inseparables se retiraran del lugar. No tenía ganas ahora recibir miradas de molestia y narices arrugadas, fingiendo que apestaba.
—Ay gracias Nancy —dijo en tono presumida la tal Verónica—. ¿Apoco no sabes que ésto me lo regaló mi nuevo novio, sí ya todos lo saben?
Contraje un ojo por su pregunta tan superficial. Nunca cambiaba.
—No, sorry. Estuve ocupada estudiando para los exámenes. Pero cuéntame: ¿Qué te dijo tu novio cuando te lo dió?
—Pues... me dijo que soy muy chula, preciosa y guapa. También me dijo que siempre me amará y que sólo tiene ojos para mí.
Nancy toda emocionada dió un chillido que hasta me dolieron mi pobres oídos. Exclamó—: ¡Que romántico! Son la pareja perfecta.
—¡Lo sé! —Rió Verónica—. Pero cree esto amigis: "A todos los chicos aman a las chicas con un cuerpo y cara bonita". Es por eso que es super importante aprender a pintarte, vestirte y cuidarte.
Con mi oído pegado a la puerta que me separaba yo y de mis compañeras de clase, noté que no dominaba con ninguna de las tres habilidades.
—Eso es cierto —afirmó su amiga—. Me alegra que al menos yo me parezco mucho a mi mamá. Ella tiene buenas caderas, cuerpo tonificado y un cutis hermosa. Sin eso, terminarás teniendo tu primer novio hasta la universidad.
Bajé mi mirada e hice una línea fina con mis labios al ver que aún no usaba corpiños tal como lo hacían ellas, ni tampoco tenía lindas piernas, o una piel tan destacable.
—Si, que horror —dijo Verónica con lleno de desagrado—. Pobre de ellas, pero que bueno que mínimo no sean como Sayuri quien de plano no tiene remedio. Aunque ella desee tener un cuerpo formado mediante con ejercicio tal como lo aplica muchas modelos, no podrá hacerlo por ser tan débil.
—Seh, incluso a mi me dió mucha lastima la vez pasada cuando el profe de educación física la hizo salir de la cancha cuando quería jugar basquetbol. Que feo su situación. Me moriría si yo tuviera un cuerpo como la de ella.
—Ay Nancy, mejor no nos pongamos tristes —opinó la amiga—. Deberíamos estar felices con nuestros papás por hacernos muy bonitas, inteligentes pero sobre todo... ¡sanas!
—¡Si!
De momento dió el toque del fin del receso y ambas se salieron corriendo de regreso al salón. Por mi parte, sentí mis lágrimas derramarse por mi cara, la punta de mi nariz roja y mis manos tapando con fuerza mi boca para no dejar salir mis llantos. Eso hirió, hirió hasta el alma. Sus palabras, sus comentarios, su plática, lastimó de la peor manera mi autoestima.
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UN ÁNGEL ENAMORADA DE UN CIEGO ©
Romance¿Acaso él pudo enamorarse de mi sin la necesidad del amor a primera vista? NO COPIAR NI ADAPTAR, RESPETA LAS HISTORIAS DE LOS DEMÁS. TAMPOCO TE INSPIRES EN ELLA, SEPA TENER TU PROPIA IMAGINACIÓN.