Capítulo 26

228 18 12
                                    

–Pennywise, tengo un plan. –Me miró fijamente y se levantó del sofá donde estaba con Jessica. –Voy a ir con Phoebe al bosque a buscar a Christopher y tú te quedarás con Jessica, ¿por qué tú? porque eres más fuerte que yo y podrás defenderla mejor. –Asintió con la cabeza sin ninguna queja y cogí las llaves del coche.

–Ten cuidado con Christopher, es muy rápido atacando. –Abrí la puerta y salí de casa con Jessica a mis espaldas.

–¿Por qué tanta prisa? Tenemos toda la noche. –Cierto, pero no me basta. Ese chupa sangres nos está jodiendo la vida y puede hacer un puto ejército de vampiros en nada.

–Phoebe, te voy a ser sincero. Ese puto idiota va a atacar a Jessica, o volverá a por ti, así que si no movemos el culo estamos jodidos. 

[...]

–¿Sabes dónde pueden estar los vampiros a esta hora?

–Normalmente en el bosque o en una cueva. –Asentí con la cabeza, pero realmente no sé por donde ir porque estamos rodeados de árboles.

–No tienes ni puta idea, ¿verdad? –Volví a asentir con la cabeza y soltó una pequeña sonrisa, que para mí significó que la cagué completamente.

Cálmate y pensamos en algo. –Le miré seriamente por ese comentario.

–¿No entiendes de qué va todo esto? –Me miró con delicadeza, y a su vez, dubitativa. –Phoebe, te lo dije antes. Van a por ti, a por mi chica y todo porque quiere matarnos (Pennywise y yo). ¿Qué puta parte no entiendes? –Se levantó de donde estaba sentada, y miraba a su alrededor como un lobo buscando su presa.

 ¿Qué puta parte no entiendes? –Se levantó de donde estaba sentada, y miraba a su alrededor como un lobo buscando su presa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

–Está aquí. –Miré por encima de mi cabeza, y los pájaros volaban por donde vinimos. –Prepárate porque no es Christopher. –La invasión empezó y nosotros sin hacer nada.

–¡A tus espaldas! –Gritó señalando por encima de mi hombro y al girarme esquivé al vampiro que venía a toda velocidad. Y justo al hacer eso, como Phoebe estaba a un metro y media de mí, lo cogió del cuello y le arrancó la cabeza.

–Hay más, verdad? –Asintió con la cabeza, y sus ojos eran un color muy llamativo, dorados. Muy diferentes a los míos cuando tengo los ojos amarillos, como la miel.

Otro vampiro corría hacia dónde yo estaba y lo primero que hice fue dejar que se acercara y cuando esté en la distancia que quiero, le morderé con precaución.

Phoebe hizo algo parecido, pero en vez de dejar que se acercara, se lanzó directo hacia él.

Phoebe hizo algo parecido, pero en vez de dejar que se acercara, se lanzó directo hacia él

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

–Tienes que jodidamente bromear.

–¿No viene el payasito? –Apareció Christopher con sangre en la cara y miró fijamente a Phoebe seriamente. –Ella me pertenece. –La señaló mientras daba varios pasos más.

–No te pertenezco. –Fue lo único que dijo, pero sus ojos rojos me decían que quería atacarle en cualquier momento, cosa que no debería de hacer.

No ataques Phoebe.

*¿Por qué?*

Porque es muy rápido y no estamos preparados y menos sin Pennywise.

–Si no vais a luchar iros porque este es mi terreno. –Corrió hacia los árboles y desapareció.

–Volvamos. –Dejé que Phoebe fuera delante por si la duda y tenerla a vista para cualquier cosa que pueda hacer Christopher.

[...]

–No podemos arriesgar nuestras vidas, Phoebe. –Llegamos a casa discutiendo por todo el camino. –Es muy poderoso...

–Pero solo es uno, Alex. –Me miró Jessica con una ceja alzada y miró a Phoebe con el mismo gesto.

–Si tú piensas que puedes contra él, piénsalo, pero no voy a arriesgar mi vida y la de Pennywise, y para colmos también la de Jessica.

–Ni siquiera lo intentamos y ya te rajas, joder. Antes ni siquiera eras así, pero claro, está tu princesa, ¿no? –Quedó todo en silencio, pero mi mirada clavada en Phoebe era como la de Pennywise.

–No hables de Jessica porque no te hizo nada. –Aguanté mi ira apretando con fuerza mis puños.

–Eres un puto demonio de mierda y solo te importa tu novia.

–¡Porque la quiero y porque ella es la que me valora! No hables, Phoebe porque no quiero acabar a puñetazos contra ti. –Sus ojos dorados y los míos rojos, pero no hubo ningún roce, Phoebe se fue a su habitación y yo me senté en el sofá.

–¿Estás bien? –Miré a Jessica con una sonrisa un poco falsa y acurruqué mi brazo en sus hombros.

–No hablemos de eso. –Asintió con la cabeza. –¿Quieres salir? Hace bastante fresco así que ponte algo que sino te mueres de frío. –Sonrió con timidez y se levantó del sofá para dirigirse al dormitorio y cambiarse de ropa.

No quiero problemas contigo, Phoebe.

*Vete y ya.*

¿Me quedo con ella?

Pensé que te fuiste de caza.

Quise hacerlo, pero quiero estar con Phoebe para calmarlo.

Pues sal.

Vi como mi sombra iba cambiando a la de Pennywise y cada vez que pestañeaba la sombra cogía volumen, y a su vez, color.

–Perfecto. –Sonrió, y vi a Jessica bajar las escaleras con prisa para darle un abrazo a Pennywise. –Hace nada nos vimos, no seas exagerada. –Me miró mientras sonreía, y le devolví el gesto mientras alzaba la ceja.

–¿Te quedas, verdad? –Asintió Pennywise y Jessica bajó la cabeza para mirar el suelo. –Bueno, vámonos. –Pennywise quiso llamarla, pero sintió que no podía hacer nada, solo podía esperar a que Christopher muriera.

–Volvemos esta noche. –Jessica abrió la puerta sin mirar a Pennywise y salió agarrando mi mano mientras cerraba la puerta con la otra.

–No te enfades, cielo. –Sonrió, pero era más falso que yo yendo al cielo. –No me pongas esas caras falsas, me sientan mal. –Esta vez si sonrió de verdad, por lo que hice lo mismo. Verla sonreír después de tanta mierda es algo que me alegra mucho.

–¿Dónde vamos? –Preguntó mientras me miraba con esos ojos tan hermosos.

–Pues es una sorpresa. –Resopló y me encogí de hombros. –Lo único que puedo decirte es que será un lugar que nunca esparabas ver. –Me miró con una seria mirada porque sabía perfectamente que no le gustaban las sorpresas porque era muy impaciente.

–Dime que es, por favor. –Me miró como un cachorrito pidiendo comida, y lo único que hice fue sonreír.

*Narrador.*

Lo que nadie sabe es que sería muy arriesgoso ir donde Alex tenía todo preparado. Tampoco sabía que pondrá en peligro vidas, pero no se sabe cual o cuales, lo único que sabe es que era un sitio seguro, pero como dije... "ERA".

Espero que les guste, y perdón por tanta tardanza, he estado con mucha tarea, pero intentaré subir más capítulos esta vez :)

Enamorada de la muerte [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora