Cuando Emma llegó a casa ese día, realmente estaba muy afectada por todo lo que había pasado, no podía dejar de llorar debido a que sus más terribles miedos se habían vuelto realidad, pero a pesar de eso, no podía darse el lujo de descansar. Empezó a buscar entre sus cosas cualquier cosa que le sirviera para comprobar que ella no era hija de Norman. Desde albúmenes hasta la historia clínica que le dieron cuando Sol nació. Sin querer se quedó observando todos los recuerdos que tenía de Sol, mientras seguía llorando porque la extrañaba demasiado. Era la primera vez en seis años que se separaba de ella y estaba realmente destrozada.
Así paso su primera noche en vela sin Sol.
Al día siguiente tuvo que ir a la guardería con Gilda para decirle que se tomaría un tiempo libre por todo lo que había pasado, Gilda trató de consolarla y le aseguró que todo estaría bien, que podía volver cuando quisiera. Emma agradeció por su compresión.
Gilda fue una de las primeras personas en darle una mano, dándole trabajo, incluso ayudándole durante todo el embarazo, al principio cuando se había quedado sin dinero y no podía ganar lo suficiente para comprar las cosas para su bebé, era Gilda quien le daba la ropa que Conny dejaba para ponérsela a su bebé o le ayudaba con los pañales.
Volvió a casa con Yuugo, quien también estaba realmente destrozado por la perdida de Sol, pero aún así, él se mantenía un poco más optimista que ella y la consolaba cada vez que podía. Siempre le daba ánimos y valor para luchará por su hija y no se dejará ganar de Norman, Emma se dejaba consolar por él, pero no había palabra que valiera para que los dos recuperaran la alegría que alguna vez hubo en ese hogar.
El segundo día sin su hija fue aún más devastador, Ray fue a recogerla en el auto mientras volvían a la capital, ella había traído el cepillo con el que cepillaba el cabello de su hija todos los días, y dejaron en dos laboratorios distintos las muestras de Ray y de ella misma para poder confirmarlo, Ray tuvo que pagarlo con su propio dinero, pero Emma realmente esperaba que todo fuera bien esta vez.
Después de un largo viaje, se reunió con Anna quien también estaba trabajando bastante para ayudarle de alguna manera, Anna al ver todo lo que Emma le trajo quedó un poco más tranquila.
—Aún así... ten en cuenta que aunque el tiempo no concuerde, la prueba de paternidad dio positiva — Emma asintió, sabiendo el riesgo —Tú... ¿le dijiste a Ray? — Preguntó ella es un susurró.
—Si, se lo dije — Anna sonrió un poco, viendo como el chico les cocinaba algo para comer de merienda.
—¿Y cómo reaccionó? — Preguntó ella algo preocupada.
—Estaba confundido, pero creo que me creyó — Emma sonrió un poco incomoda — Ray dice que como haya sido no importa, lo importante es recuperar a Sol — Anna sonrió levemente.
—Te dije, Ray te perdonaría — Emma sonrió un poco más tranquila.
El secreto que tanto quería guardar había salido por fin a la luz, y en vez de sentirse odiada y despreciada por la persona que tanto amó, él la había perdonado tan fácilmente, mientras seguía diciendo que la apoyaría y le ayudaría. Emma realmente podía sentir un poco de consuelo por eso, Ray no la dejaba sola a pesar de lo mal que se ponían las cosas, y aquello la hacía muy feliz.
—¿Qué tanto están charlando ustedes? — Ray llegó con unas tazas de té y lo que cocinaba para las chicas, mientras lo ponía en la mesa.
—Uhm, solo estaba diciéndole a Emma que Sol se pondrá muy contenta cuando sepa que eres su padre — Ray se estremeció al oírle, mientras un sonrojo iluminaba su cara.
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Mariposas contra el viento
RomanceCrecer no era fácil, especialmente para Emma Ratri, su dulce infancia se fue con las obligaciones y cargas pesadas que sus padres le imponían por sus grandes expectativas con ella. Lastimosamente en su adolescencia se vio envuelta en un extraño tri...