-Puta vida - digo entre dientes
Tomo las llaves de mi auto y bajo las escaleras encontrándome con Lulú.
-¿Por qué estas despierta, sucede algo nana?
Niega con la cabeza - ¿vas a el club? - pregunta.
-No nana no te preocupes, voy a recoger a Luis que está en un bar, al parecer tiene problemas con su casi mujer.
Lulú ríe con ganas y me da dos palmadas en el hombro.
-Ve, que Dios te bendiga, dile que tenga guebos y hable con ella.
-Sabes que no hará eso.
-Eh William, ¿Kayla está despierta?
La sola mención de su nombre pone toda mi piel rígida.
-No lo sé, creo que si, adiós.
Por el espejo de la ventana noto que Lulú se me queda mirando con el entre cejo fruncido.
Creo que fui demasiado evidente y a esta vieja nada se le escapa
-Mañana hablaremos - dice antes de que cierre la puerta tas de mi.
Manejo media hora hasta llegar a donde está.
Cuando entro al bar donde Luis me dijo que se encontraba, analizo todo el lugar y tiene pinta de ser de mala muerte.
Visualizo a Luis a lo lejos con una mujer sobre las piernas y con el rabillo del ojo veo a Yaneetza abrirse paso por la otra entrada tratando de encontrarlo creo.
-Hacelero mis movimientos hasta donde se encuentra el.
Tomo del brazo a la mujer y la llevo hasta un pasillo, está tan borracha que no fue mucho el esfuerzo que hice, la dejo con un mesero y me devuelvo rápidamente a los sillones donde está Luis.
-Carajo imbecil, viene Yaneetza y tu con una puta en las piernas, se que no lo reconoces pero se te not que la amas, ten agallas y habla con ella.
-Si la amo - fue su respuesta - la amo mucho, pero no soy capaz de reconocerlo frente a ella, me va a tener como un imbecil, lo sabes.
Para cuando lo dijo Yaneetza ya estaba atras de nosotros escuchando lo que decía.
-Ya Luis, supera lo que nos pasó tiempo atrás, dste otra oportunidad.
-Cállate William, yo por lo menos lo intenté tu te cerraste.
No le voy a discutir algo que es mas que cierto.
Solo mis amigos, familia y Kayla saben que no amo a mi futura esposa, que me caso con ella por una apuesta de mi padre.
-La nana te manda a decir que no tienes guebos ¿y sabes? Le creo, no eres capaz de hablarle a una mujer.
-Cállate, oye le tengo miedo a Yaneetza, tiene mucho carácter - se rie - la última vez que salimos una mesera me entregó su número no se para que diablo y actuó como si nads, cuando llegamos a la casa - pasa su mano por la cara y se ríe - casi me corta los guebos, tuve que salirme del ahí casi desnudo - nos carcajeamos un rato hasta que él dice - pero la amo.
-También yo - se escucha la respuesta tras nosotro. Claramente era ella con los ojos empapados, rodea el sillón y le da un beso a mi amigo - nunca pensé que tu primer te amo fuera despues de una pelea en un puto bar.
Vine a contarle un problema a mi amigo y terminé soluciónando uno de él.
Me ofrezco a llevarlos y Yaneetza se niega, dice que lleva su hombre en el auto de él que está afuera.
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Un contrato con mi jefe.
Roman d'amour- no leerás? - pregunta rozando mi cuello con su nariz - ¿No me hará sufrir o sí? - su pregunta hace que me sienta insegura aunque no tengo otra opcion. prácticamente me aposte a mi misma - No, no lo haré - asegura y firmo.