8. ¿Traes a Miriam contigo?

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-Narra María-

Miriam se ha ido hace tiempo, y comienzo a preocuparme un poco. Seguro que ha ido con Pablo, y eso no me gusta nada.

-¿Sabes dónde puede estar Miriam?-Jesús se dirige a mí, y me encojo de hombros

-No lo sé, cariño.

-¿Seguro? Es que es muy raro...-insiste, y niego

-No, no sé.

-Dani está muy preocupado...

-Dile que no se preocupe, no puede estar muy lejos...ni muy mal.-intento animarle, y me sonríe tristemente

-Voy a volver con él, haber si va a hacer alguna tontería...que es capaz.

Me acerco a la silla y cojo una chaqueta roja, meto mi móvil en el bolsillo del pantalón y me dispongo a irme.

-Vale, yo voy a llamarla.-aseguro saliendo de la habitación, mientras me coloco la chaqueta

Bajo las escaleras rápidamente y salgo a la entrada del hotel.

Saludo al recepcionista, quién me devuelve la sonrisa.

Marco el número de Miriam pero no lo coge. Esto comienza a preocuparme bastante.

Salgo del hotel, y el viento frío da en mi cara y me cierro la fina chaqueta que he escogido antes. Vuelvo a marca su número y miro hacia los dos lados. Derecha e izquierda. Después vuelvo a llamarla, pero sigue sin cogerlo. Y lo intento por última vez, antes de desistir.

La escucho sollozar, pero parece estar tan cerca...

Me giro de nuevo, pero nada.

-'El jardín'.-susurra

Levanto la vista hacia el jardín de la casa de al lado y en cuestión de segundos la veo. 'Voy' susurro y diviso como ella asiente, mientras lágrimas cadn por su rostro. Después cuelgo, para disponerme a ir con ella.

Camino lo más rápido que puedo y al llegar hasta ella, la abrazo.

-Vamos al hotel.-me ruega y asiento

Caminamos hasta la entrada y esperamos al ascensor.

-¿Qué pasó?-me atrevo a preguntar

-Luego, ahora necesito quitarme el maquillaje y que no me vean así.

-Pues...están en tu habitación los dos...puedes venirte a la mía, no creo que estén allí.

Una mujer sale del ascensor, y nos saluda. Al ver a Miriam se acerca a nosotras.

-Die hübsche Mädchen sollten nicht trauern. (Las niñas bonitas no deben llorar)

-Ruhig. (Tranquila)-susurro y la mujer asiente, para luego irse

Subimos al ascensor, pero justo antes de que se cierren las puertas, alguien sube junto con nosotras. Me doy la vuelta levemente y me encontré con Simón.

-Perdón, Miriam.

Miriam se da la vuelta también y este se abalanza sobre ella.

-De verdad que lo siento, nunca creí que mi hermano llegaría a tanto.

-Tranquilo, tú no tienes nada que ver.-dice con un hilo de voz

-Sí, yo le dije que se fuera con la banda. Es mi culpa.

-No, Simón. Es como si yo te digo que te tires por un puente, si te tiras es tu decisión, no la mía.

-Pero...-intentar interrumpirla

-No, calla. Tengo que irme, mi marido puede estar preocupado.-suelta enseguida

-Bueno, pero hablamos otro día.-susurra, sonriéndole

-Venga, va. Aquí sobro...-murmuro y Simón me mira

-Que no, enana.-suelta pasando su brazo por mi hombro y río

-De verdad que tenemos que irnos, te quiero.-besa su mejilla y este sonríe

-Os quiero, adiós.-sale del ascensor y pulso en botón

Llegamos a nuestra planta y nos dirigimos hasta la puerta de mi habitación, para no encontrarnos con los gemelos.

Saco la tarjeta que hace de llave, la meto en la ranura y la puerta se abre. Pasamos dentro y escucho a alguien.

-¿Traes a Miriam contigo?

N/a.- ¡Perdón! ¡Perdón! ¡Perdón! Comenzó de nuevo el instituto y me olvidé completamente de publicar, ¡lo siento muchísimo!
Pd; no me maten.

Un simple sueño. [#2TEDM] (Gemelier)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora