Las personas tienden a ser crueles... Los humanos nunca fuimos totalmente confiables, tenemos el simple impulso de tomar el camino fácil, o el que daña a los demás, todos, sin excepciones, tenemos algo que está mal en nosotros, algo que tal vez odiamos, tal vez amamos, que nos hacen ser odiados, o, que de alguna forma, nos hacen ser amado.
Supongo que en algunas personas la maldad es lo más se hace notar, incluso aunque sean más amables de lo que crees, y otras, que si bien son crueles, parecen ángeles protectores del cielo. La apariencia, el tono de voz, el sociolecto que utilizamos, todo, forma una idea inconsciente en nuestro cerebro de lo que esperamos de la otra persona, pero, a fin de cuentas, la sociedad y relaciones humanas se generan con este absurdo principio, que incluso aunque se intente quitar u ocultar, en el fondo estará allí.
Lo que vemos, lo que escuchamos, lo que presenciamos, o lo que sentimos, nos dan una idea de la otra persona, sus acciones, sus gustos, sus ideas y formas de reaccionar ante distintas situaciones. Entonces...
¿Cuántas veces te paraste a pensar si lo que oíste era verdad?
¿Cuántas veces reprochaste a alguien por su comportamiento?
¿Te plantaste a alguien porque lo que decía estaba fuera de lugar?
¿O no lo hiciste? ¿Por qué?
¿Alguna vez le preguntaste a alguien "¿Qué piensas de mí, de cómo me comportó?"?
¿Sentiste en algún momento que tus acciones estaban mal?
De boca en boca, si bien pueden encontrarse verdades, también se pueden encontrar exageraciones de la realidad. Son pequeñas cosas que se odia y se aprecia de la humanidad, ser opacos, no mostrar nuestra totalidad, por miedo o por simple misterio. A veces...con quitar unas simples capas, el corazón de una persona se puede abrir, pero en otras ocasiones, incluso aunque excaves, solo encontraras más escudos...
Pero hay muchas más formas de abrir un corazón...
¿Las quieres ver?
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A mano- Zoro y Tu
AléatoireSeamos sinceros. Yo era la reina, solo que nadie aquí parecía saberlo. Este estúpido lugar no era para mí. No era importante, exigente, con influencia, ni siquiera tenía un campus decente, pero me convenía estar aquí y realmente no cambiaría de pare...