El silencio embargo la mesa del almuerzo, Tori observo el anillo que sostenía Jade con los ojos humedecidos. La ojiverde pareció sentir su angustia, sus miradas se encontraron por varios segundos antes de que la morena de que se pusiera de pie con torpeza.
-Tengo que buscar a Sikowitz –Susurro la joven tomando su mochila.- Nos veremos en la salida.
La castaña se alejo lo más pronto posible del lugar ignorando el llamado de sus amigos, las lagrimas ya resbalaban por sus mejillas y parecían incapaces de detenerse. El nudo en su garganta la obligo a sollozar en voz baja mientras cerraba la puerta del pequeño cuarto del conserje. Inútilmente trato de limpiar las lagrimas en sus mejillas, y agradecer el hecho de que el encargado no estuviera en un rincón escondido.
Tori se recargo en la pared más cercana dejándose caer poco a poco, sus ojos estaban nuevamente cristalinos y llenos de dolor. Iba perder a Jade, pero ¿Cómo iba hacerlo si nunca fue suya? Beck siempre ha sido y será quien este al lado de ella pase lo que pase. No había alguna oportunidad, la ilusión y esperanza de que algún día cambiaran las cosas, se desvaneció en el momento en que Jade mostro el anillo.
El juego había cambiado, llegado a su fin de manera brusca e inevitable.
Las reglas lo marcaban así.
Ojala nunca hubiera caído en la tentación, ojala jamás hubiera traspasado el límite entre el amor y odio con Jade. Esa línea delgada que parecía inexistente cuando estaba junto a la joven. Tori lanzo su bolso contra el bote de basura intentando liberar la impotencia y desesperación que sentía.
Victoria maldijo la hora en que se entrego a Jade West sin medir las consecuencias.
-Solo tienes que tranquilizarte, por favor. –Suplico la castaña en voz baja mirando a su compañera.
-No, ella quiera modificar mi obra. ¿Sabes lo que va a pensar mi padre? El me odia y cree que todo esto es una estupidez –Espeto Jade con enojo e impotencia.- Muchas gracia Vega, porque lo va a confirmar cuando venga.
-Jade…
-Creo que ya has hecho suficiente –interrumpió antes de salir del teatro.
Tori suspiro en voz baja con melancolía, quizás Jade tenía razón y había empeorado las cosas. Ahora entendía porque deseaba que su producción saliera perfecta. Ella sintió la culpa sobre sus hombros como una gran carga pesada, tenía que encontrar una solución lo más pronto posible.
El sonido de la puerta abrirse nuevamente hizo que levantara su vista con la esperanza de que fuera la chica pálida, sin embargo en su lugar entro Beck mirando a su alrededor con confusión.
-Tori, ¿Dónde está Jade? –Pregunto dirigiéndose hacia ella con las manos en los bolsillos.- Creí que estaban juntas viendo los detalles de la obra.
-Ella me odia, Beck. He arruinado todo..-La voz de la joven media latina se desvaneció poco a poco con dolor, no podía entender porque el rechazo de Jade era algo significativo. Desde un principio siempre supo que existía una gran barrera de diferencias que la separaba… que les impedía tener una relación normal de conocidas, o compañeras.- yo no sé qué hare. –Confeso sentándose en una de las butacas con pesadez.
-No tienes que sentirte mal, Jade debe comprender que no siempre se pueden realizar sus caprichos. –Consoló el muchacho sentándose a su lado.- Creo que ya has hecho bastante, hiciste lo que pudiste.
-Pero me prometí a mi misma que le ayudaría.
-A veces es mejor renunciar a algo que parece ser imposible, ¿sabes? –Espeto Beck con una pequeña sonrisa simpática.- No importa que no lo sea, simplemente haz lo que creas más conveniente. Y en cuanto a Jade, yo me encargare de ella.
-¿Por qué tu no la apoyaste? Quiero decir, te vez tan tranquilo con todo esto.
-Conozco a Jade desde hace mucho tiempo, se que puede sonar cruel pero una obra no es tan importante.
-Su padre iba a venir. –Defendió la joven con cierta molestia.
-Ese hombre no sabe lo valiosa que ella es, una obra no va a demostrárselo. Además no tengo el dinero suficiente para producirla. –Explico desviando su mirada hacia el escenario.- Mi punto es que por algo suceden las cosas, tal vez tendremos suerte para próxima.
La castaña asintió y lucho para impedir que las lágrimas resbalaran por sus mejillas. Las palabras de Beck resonaron en su cabeza una y otra vez, por primera vez había logrado que la chica le mostrara su lado amable y frágil. Ella no iba renunciar fácilmente a ese reto, ella prometió ayudar a Jade así tuviera que mover cielo, mas y tierra para conseguirlo.
-Beck, voy a solucionar esto. –Susurro poniéndose de pie con rapidez.- Tengo una idea.
-Tori, no tienes porque…
-He hecho una promesa y no pienso romperla. –Dijo antes de salir del teatro sin mirar atrás.
Pero algunas promesas por muy insignificantes que parezcan son difíciles de cumplir. Un ejemplo de ello podría ser su situación actual, ella prometió no involucrar sus sentimientos y lo hizo sin darse cuenta. Unos golpes en la puerta la hicieron sobresaltar, rápidamente limpio todo rastro de lágrimas en sus mejillas intentando controlar los nervios que se acumularon en su cuerpo.
-Abre la puerta, Tori. – Ordeno la causante de su dolor con voz suave.- Por favor, se que estas ahí.
-Vete –Contradijo la castaña con voz extrañamente indiferente.- No quiero verte.
-Vega…
-¿No me escuchaste? No quiero verte –Repitió manteniendo su voz firme. Incluso en sus propios oídos el tono que utilizaba sonaba desconocido, nuevamente las lágrimas cayeron lentamente por sus mejillas y esta vez no se molesto en tratar de detenerlas.
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AlexaVeela, Aug 28, 2011 Updated: Dec 13, 2014, Break Apart Her Heart . https://m.fanfiction.net/s/7332226/1/Break-Apart-Her-Heart.
En el link encontrarán la historia original.
¡EL LIBRO Y LOS PERSONAJES NO ME PERTENECEN!
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Break Apart Her Heart
FanficProbablemente era masoquista por soportar todas las humillaciones, por disfrutar esos golpes emocionales que Jade lanzaba contra ella sin ningún toque físico. Sin previo aviso o imaginación ella se encontró totalmente atraída por la joven de ojos ve...