capítulo once.

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Era como derretirse.

Libertad se derretía de solo recordar el roce de sus labios con los de Valentín. Su mente todavía no procesaba del todo aquellos recuerdos, es decir, claramente estaban ahí, pero se mezclaban entre sí y no la dejaban comprender por completo la secuencia.

¿Acaso él también revivía esos cortos momentos una y otra vez? ¿Era ella la única realmente afectada por todo?

Se cansó de pensar en eso, no en él, sino en eso. Se cansó de pensar en cómo debía actuar el lunes en cuanto volviera a la cocina y en qué decir. Valentín seguramente iba a actuar como si nada, eso era más que suficiente. Simplemente se dedicaría a seguirle la corriente, ese era el mejor plan.

Era cuestión de pasar el fin de semana lo más en paz posible para afrontar los días laborales que se venían de la mejor manera, no debería ser tan complicado. Con ese objetivo ya establecido, Libertad se dedicó a jugar al ajedrez con su padre, a vigilar que siguiera su dieta y a trabajar en su nueva obra. No tenía mucha forma, pero sí tenía muchos colores, eso era más que suficiente para ella.

En el mientras tanto, el fin de semana de Valentín era lo más similar que él conocía a un método de tortura medieval. ¿Cómo dejó que se fuera después de ese beso? ¿Lo recordará? ¿Le habrá gustado? Era difícil ponerse en los pies de otra persona cuando jamás te interesó hacerlo por alguien. La empatía no era exactamente su área, y eso ahora le resultaba de lo más frustrante. Su fin de semana consistió en practicar cómo no parecer tan imbécil en frente de Libertad y en jugar con Baco, su perro. Quiso buscar consejos y comfort en una de sus series favoritas, pero se dio cuenta de que en Succession estaban todos en una situación muy similar a la suya y concluyó en que ni siquiera en la ficción los hombres eran buenos para hablar con una mujer.

Lunes por la mañana y no quería salir de la cama. No se sentía enfermo, se sentía más que inútil y avergonzado por su comportamiento infantil. Por un momento pensó en llamar a Bernardo para avisarle que no iba a poder ir porque volaba de la fiebre o porque Baco estaba muy mal de la panza y tenía que cuidarlo. Su jefe y amigo conocía a Valentín lo bastante bien como para saber cuando mentía y cuando no, así que decidió no arriesgarse a quedar atrapado en una enredadera de mentiras que iban a desembocar en tener que contarle con lujo de detalles lo sucedido el viernes pasado.

Agarró las llaves con su mano menos temblorosa, no quería que se dieran cuenta de que el mejor chef del país se ponía nervioso por cruzar miradas con una chica cualquiera. Bueno, para él no era cualquiera, pero para el resto sí.  Sus subordinados comenzaron a llegar, pero su delantal estaba aún colgado y su casillero estaba vacío. Miró el reloj y todavía no había terminado el horario de llegada, por lo que pensó que quizá estaba retrasada y eso era todo, pero los minutos pasaban y Libertad no aparecía.

Se sintió decepcionado, pero no quiso admitirlo. Su orgullo había sido herido de una forma impensada para él... ¡Nunca antes lo habían rechazado! Si bien no era un hombre de muchas noches de habitación en habitación, ninguna mujer con la que haya estado se había atrevido a rechazarlo, era hermoso y él lo sabía, era una herramienta que, de vez en cuando, ayudaba.

Aquel descarado e inesperado rechazo rondó por su cabeza durante toda la jornada. Le daba vergüenza pensarlo, pero era una entretenida forma de tortura para mantener su mente centrada en algo, en lo que fuese. Lo único que sabía con certeza, era que quería irse a su casa para sumergirse en un baño caliente, tomar una copa de vino y luego irse a dormir. 

Terminó su turno, agarró las llaves del auto y fue a su inmenso departamento. Vio la hora en su reloj y se sorprendió por lo tarde que era, él estaba convencido de que era más temprano. Así de rápido debe volar el tiempo con la cabeza en cualquier lado. Justo cuando estaba por entrar a su casa, se dio cuenta de que olvidó su celular en la oficina del restaurante, por lo que tuvo que salir antes de siquiera llegar. 

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⏰ Última actualización: Jun 18, 2021 ⏰

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𝐜𝐨𝐜𝐢𝐧𝐚 - 𝐰𝐨𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora