9| H e r m a n d a d

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Valentine— 5 Seconds Of Summer

Bridget:

La familia, ese lugar donde muchas veces uno se refugia en busca de consuelo y otras veces por el simple hecho de sentirse cómodo a su alrededor. Muchos dicen que la familia solo es de sangre, pero yo no creo eso, jamás lo creí. Es más, eso queda muy claro cuando veo a Charlotte, quien nunca se sintió cómoda en su lazo familiar, nunca se sintió parte de algo hasta que nos conoció, me alegro por ello, porque Lottie es una de esas miles de personas en el mundo que merece la felicidad absoluta.

Y ahora, viéndola correr detrás de Wendy en el campo que nos encontramos, me hace saber que ha logrado encontrar esa felicidad, que con ayuda de Cameron logró espantar esos monstros.

Hago una mueca al recordar la vez que viajamos a Liverpool por el funeral de su abuela, y lo mal que su familia la trató, me hizo darme cuenta de cuan afortunada soy al tener una familia que me acepta, me quiere y me apoya en todo.

—¿En qué piensas tanto, nubecita?— giro mi cabeza hacia la derecha, en donde mi padre me observa con esas sonrisas que seguramente hacen a mamá suspirar. Mi padre es un hombre bastante corpulento, tiene una espalda bastante ancha, gracias a la natación que hizo en su juventud y unos brazos definidos que con el tiempo se han vuelto un poco flojos. Pero, definitivamente, mi padre es atractivo. Tiene estos ojos negros que te envuelven con una sola mirada, al igual que el pelo azabache que actualmente tiene alguna canas en él.

—En lo mucho que amo tener esta familia, papá.

Le sonrío y él me devuelve la sonrisa, luego ambos nos sumimos en un agradable silencio que siempre solemos compartir y observamos nuestro alrededor.

Es sábado de una nueva semana, y hemos decido pasar la familia Barry, Lawrence y Neer un fin de semana en la casa de campo de los Barry.

Es un lugar muy pintoresco y familiar, un gran chalet en donde nos estamos quedando, una piscina, juegos, una huerta que siempre es cuidada por el personal e incluso una pequeña granja.

—¡Cuidado!— se escucha un grito y antes de darme cuenta siento un fuerte impacto en mi cara. Me mareo por varios segundo, los cuales soy sujetada por papá y luego llevo mis manos a mi nariz. Estoy sangrando.

—¡Travis! Golpeaste el rostro de tu hermana—dice papá—¿Estás bien, cielo?

Yo me limito a asentir de manera dificultosa, joder, duele como los mil demonios.

—Lo siento, Brid. No medí la fuerza de la pelota.—comenta mi hermano menor Travis. Un adolescente rubio, revoltoso y con un corazón mas grande que toda Inglaterra.

—No, si ya nos hemos dado cuenta que. . .¡Le rompiste la nariz a mi hermana!¡Bestia peluda!— ese es Sam, hermano gemelo de Travis, por lo tanto mi hermano. Es de los el más sensato, aunque tampoco se queda atrás en eso de ser revoltoso.

—¡Ella es mi hermana también, por si no lo habías notado!

—Niños, ya basta. Travis, ve a dentro y busca algo con qué parar esta sangre. Tú, Sam, ve a limpiar el balón.—es lo que dice mi padre para luego ayudarme a ir hasta el porche, donde mamá y la señora Lorene toman el té.

—¡Pero qué le paso!—comenta mi mamá, quitando sus gafas para leer y viniendo hasta a mi con cara de preocupación.

—No es para tanto, solo fue un golpe.—digo restándole importancia, aunque el golpe siga doliendo y mi nariz esté sangrando.

—¿No es para tanto? Tu nariz parece una grana.

—¡Uh! Eso debió doler— ahora se escucha la voz de Jaden, y cuando levanto la vista lo encuentro frente a mi. Detrás de él se encuentran todos los demás.

Lo que dice tu mirada [Libro II biología "Miradas"]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora