El hijo del rey

Capítulo 7

Después de las horribles semanas de siembra, Aldith tiene las manos ensangrentadas, los pies heridos y no hay una sola tela en todo el pueblo que este limpia. Pero ella está alegre. Mas alegre que la mayoría porque va a hacer realidad su sueño.

-¿Padre? ¿Estáis despierto?

-Si Aldith, esta silla es demasiado dura para dormir.

-Bueno... Padre, me gustaría proponerle algo... Es sobre mi trabajo.

-¿Acaso quieres algo mas que trabajar en el campo?

-Bueno... Yo...

-Aldith, habla claro ¿Que quieres?

-Me gustaría empezar a trabajar de criada.

¡Crash! El ruido de un plato roto sobresalta a Aldith.

Su madre irrumpe en la habitación y la mira fijamente:

-¡No! ¡Por dios niña! ¿Cómo que criada?  ¿Me dices a que ha venido eso?
-Madre... Es que si trabajo en el palacio...
-¡¿Aun encima en el palacio!? Esta loca, loca de atar. Aldith eres nuestra hija mayor y te necesitamos para TO-DO.
-Madre, si me voy seré una boca menos que alimentar y viviré bien en palacio.
Su padre interviene con calma :
-Me parece correcto, siempre y cuándo, Aldith sea eso lo que quieres.
-Es lo que quiero.
-Hablaré con tu madre, márchate.
-Si padre, gracias.
Aldith se marcha corriendo de la cocina y sale a las concurridas calles del pueblo, corre entre los puestos y se interna en un callejón estrecho y oscuro. Al final se ve luz y Aldith corre con mas prisas. Llega a una plaza pequeña : La descubrió con Astrid y Jonh cuando eran pequeños y era su pequeño secreto. La plaza tiene una preciosa fuente blanca en el medio, las paredes que la rodean están cubiertas de hiedra de olor y exuberantes flores de colores. La fuente tiene una enredadera que la recorre, llenandola de color. Es un lugar casi mágico. Hacía mucho tiempo que no venía pero sus pies la han traído automáticamente. Se sienta en el bordillo de la fuente y esconde la cara entre las manos. Llora. Había pasado mucho tiempo desde que Aldith había llorado por última vez, años, incluso. No había llorado cuándo murieron sus hermanos pero ahora está llorando. Llorando porque desea con todos sus fuerzas que su madre entre en razón. Llorando porque hace días que no ve al príncipe.
Esta llorando de amor por primera vez en su vida.