Derek no era virgen, fácil y sencillo, no lo era, tenía experiencia teniendo sexo, omegas, betas y alfas, tanto hombres y mujeres, de diferentes rangos de edad y estatus sociales... había tenido una juventud alocada ¿ok? No lo juzguen. Derek estaba seguro en sus habilidades de cama, en su apariencia varonil, en su miembro más grande de lo promedio, pero existía una imperativa innegable en su vida y esta era su ciego amor incondicional por Stiles.Su mera presencia le hacía palpitar el corazón, sudar de nervio, tartamudear sin razón alguna, era un completo imbécil cuando estaba a su alrededor, y, aunque con el paso del tiempo y conforme su relación evolucionaba la ansiedad bajaba considerablemente, no dejaba de lado que quería siempre verse como el mejor frente al amor de su vida, era un instinto natural bien establecido en los alfas; las ganas de demostrar su valor, su fuerza, su estabilidad, y aunque ahora los tiempos modernos habían cambiado mucho las dinámicas, el hecho de que Derek era un hombre lobo le dificultaba no dejarse llevar por el instinto.
El lobo tragó saliva pesadamente y miró la puerta de en frente, el número de la habitación era la indicada, tanto Stiles como él, habían quedado en rentar uno de los cuartos de celo en una instalación cercana a los alrededores de Beacon Hills, al principio habían pensado en pasarlo en su propia habitación pero concluyeron que sería extremadamente incómodo para el Sheriff oler sus feromonas y escuchar sonidos innombrables saliendo de la habitación de su hijo, aunándole que su padre era un alfa solo dificultaba las cosas, su instinto de proteger a su cría tarde o temprano lo llevarían a cortarle el pene.
Al final decidieron que rentar un cuarto en las instalaciones de celo era lo más indicado, no solamente tendrían la privacidad que se merecían, sino que se sentirán más cómodos sabiendo que estos cuartos estaban hechos especialmente para la comodidad de las parejas.
Una vez que el depósito se había hecho lo siguiente por hacer era reunir alimentos altos en calorías, electrolitos para hidratarlos durante los tres días que durarán en encierro, miles de métodos anticonceptivos, exámenes de salud para asegurarse que ambos estuviesen limpios, lubricante, aparatos sexuales, entretenimiento cuando ambos estuvieran anudados y productos para la higiene personal. De todo ello se había encargado Derek, y aunque Stiles se había ofrecido a ayudarle, el alfa creyó que una buena manera de demostrar su utilidad era encargándose de todo él mismo.
Después de semanas de preparación el día llegó, el lobo se había limpiado horas antes de llegar al cuarto, su aliento era fresco, su piel olía bien, su zona pélvica había sido rasurada dejando tan solo el rastro de poco vello púbico bien cuidado, nunca en su vida había sentido tanta comezón como en esos momentos, Derek, como el lobo respetable que era, decidió no rascarse y aguantarse la picazón, no quería que Stiles lo viera con los huevos rojos así que era preferible abstenerse.
Y ahora, después tantos años de noches de martirio con ningún acompañante más que su mano derecha, después de días y noches actuando como imbécil detrás del omega, de tener que sufrir por su excitante aroma... ahora, por fin tenía lo que quería, una relación con la persona que amaba y eso lo ponía increíblemente ansioso.
No lo mal entiendan, Derek estaba loco por Stiles, estaba tontamente enamorado y justo por eso sentía aquellos nudos en el estómago, manos sudadas y garganta seca.
Quería complacer a Stiles, quería hacerlo sentir bien, quería amarlo y mimarlo como se merecía pero...¿Sería capaz de lograrlo? Toda su vida estaba llena de decepciones, él era una decepción, era incompetente, un chiste de alfa y un lobo mediocre. A veces se levantaba y se preguntaba qué había hecho para merecer a Stiles, y la respuesta no llegaba, porque a decir verdad, Derek no había hecho nada, no se lo merecía, jamás lo iba a merecer y por ello, gastaría cada minuto de su vida recompensando a Stiles por haber decidió quedarse con él...
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Tu olor es mi adicción...Literalmente
RomanceDerek un alfa ex-adicto a la Marihuana, es amigo de Stiles un omega que nunca le había dado la oportunidad a Derek de oler su esencia por todos los medicamentos que tomaba... Pero ¿Qué pasará si un día por un accidente sus medicamentos fallan y Der...