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DIA 8.- Tren Atrasado [Makoto PoV]

Estaba en la estación, esperando en compañia de Haru, cuando anunciaron que el próximo tren y todos los siguientes se retrasarían indefinidamente a causa de las nevadas ocurridas durante las últimas horas. ¡No pude evitar sobresaltarme! Si el tren se atrasaba, llegaríamos tarde a nuestras clases y eso no era bueno, Haru no puede descuidar sus entrenamientos y yo no puedo faltar a clases, las asistencias y estadías son parte de mis evaluaciones, no es necesario mencionar que también tengo tareas por entregar y notas por tomar, pero... ¿Qué hacer? ¿Qué hacer? No podíamos quedarnos a esperar.

—Sería mejor salir y tomar un taxi —dije—, ¿no es así, Haru-chan?

—Quita el "chan" —fue todo lo queme respondió, pero cuando alzó su mirada y me observó, pude leer las palabras en sus ojos claramente "Ni en broma, Makoto". Lo comprendía. Un poco solamente. Yo tampoco quería salir de la estación a tomar un taxi. Incluso cuando el invierno en Tokio no era tan frío como en Iwatobi, no dejaba de congelarme hasta los huesos y las nevadas que calleron durante los días pasados no ayudaban.

—¡Pero llegaremos tarde! Yo no puedo desatender mis clases y Haru tampoco debería descuidar su entrenamiento.

—Y Makoto —percibi el tono de molestia en su voz. Sabía que no le gustaba cuando era insistente en lo que me ponía mal, pues sólo me hacía sentir peor, pero no podía evitarlo a veces— no debería descuidar nuestra relación.

"¡¿Eh!?" Paprpadee un par de veces. "¿Descuidar nuestra relación? No lo comprendo ¿Alguna vez he descuidado nuestra relación? Haru nunca me lo había dicho antes." Baje la mirada y vi mis pies. A un lado podía observar los pies de haru y un poco más arriba, en mi vista periférica, nuestras manos entrelazadas. "Descuidar nuestra relación, descuidar nuestra relación... ¿Cómo he descuidado nuestra relación?" Dentro de mi cabeza, le daba vueltas al asunto. Una, dos, tres, una más y otra ya.

—Lo siento, Haru —decidí que era lo mejor disculparme, aunque todavía no encontraba exactamente el porqué—. Nunca fue mi intención.

Levante la mirada y viendo a haru directamente en los ojos, le sonreí. No una sonrisa completamente sincera, porque me sentí mal en ese momento, debería admitirlo. En el principio estaba preocupado por nuestras clases, pero ahora me preocupaba más nuestra relación. Incluso si nuestra relación como mejores amigos era antigua, nuestra relación como novios era nueva y no quería estropearla ni pronto, ni nunca. Él también sonrió de una manera apenas notable.

—Lo sé —aparto su mirada de la mía. Aún sonreía y sus mejillas comenzaban a sonrojarse. Sospeche que no era a causa del frío, pero tampoco dije algo—. Nunca lo has hecho, tonto, pero si sigues así lo harás y no quiero que lo hagas.

—¡Haru...! —lo perdí todo; mis palabras, mis pensamientos. Realmente estaba sorprendido. Sentí como su mano tomo con más fuerza la mia. Después de un momentoreaccione y, sobbresaltado, correspondí el gesto—. Entonces, ¿qué quieres que haga, Haru?

—Quedate a esperar el tren conmigo.