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res tan hermoso.

No puedo dejar de observarte,
tu piel debe ser muy suave.

Vine a verte a ti, no a los
estúpidos de tus amigos.

Owww me estás buscando con
la mirada.

Me gustaría besarte en estos
momentos.

¿Quién eres?
¿Cómo sabes mi número?

Yo sé todo de ti, mi amor.

Sé que el idiota de tu ex te pidió fotos
desnudo. Sé que no lo hiciste.

Sé que el imbécil te quito a uno de tus
mejores amigos.

Sé que mañana debes volver antes de las
nueve.

Sé que no te gusta el café negro.

Amas escuchar música.

Sé que te tocas a ti mismo todas las noches,
y no sabes cómo me pone eso.
✓ ✓

Y no sabes cómo me pone furioso
que me ignores.
✓ ✓

. ....

No había recibido más mensajes de aquel desconocido, realmente es inquietante, sabe demasiado, seguro es el estúpido de mi ex novio queriendo gastarme una broma.

Seguí atendiendo los pedidos por la ventanilla de autoservicio, escuché la campana y atendí.

- Buenas noches, ¿puedo tomar su orden? - el silencio del otro lado se hizo presente, una voz grave y profunda comenzó a hablar, el motor de su auto hacia demasiado ruido.

- Quiero ordenar unas papas fritas y un café...

- De acuerdo, serian 25,000 wons, siga adelante a donde se le entregara su pedido...- el motor del auto seguía sonando por la bocina, de pronto este se apagó y aquella voz con un tono molesto volvió a sonar.

- Dije gracias.

- Oh, lo siento, no logré escucharlo... es un placer.

Aún aturdido por el encuentro anterior tomé la orden del hombre y fui hasta la ventanilla a entregársela, pude visualizar parte de su rostro, una gorra le cubría hasta los ojos y una sonrisa blanca en mi dirección causando escalofríos.

- Aquí tiene...

- Gracias... TaeHyun, linda camisa-. Tomó la bolsa y su mano se extendió a mi brazo casi jalándome hacia él-. Tienes una piel muy suave, TaeHyun.

- Que tenga buena noche...- me retiré sutilmente cerrando la ventanilla.

Cuando regresé al mostrador por mi teléfono, pude verlo parado el los ventanales de afuera, al verme su sonrisa apareció.

- ¿Qué se le ofrece? - pregunté del otro lado del cristal.

- Derramé mi café en mi regazo, ¿podrías darme servilletas, TaeHyun?

Después de una pelea conmigo mismo, le pasé las servilletas por debajo de la puerta y el hombre se retiró volviendo a decir gracias.

Al finalizar mi turno, ya en los vestidores comencé a retirar mi camisa, cuando observé esta un escalofrío recorrió mi columna vertebral. Había olvidado colocar la placa con mi nombre esta mañana, no había manera de que alguien supiera mi nombre. Y él lo sabía.

Era él.

.                                                                             납치하다

Kindappe • 𝗯𝗲𝗼𝗺𝗵𝘆𝘂𝗻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora