No dijo nada, solo escuche el click de la puerta al abrirse y sentí mi cuerpo caer ante la cama con el cuerpo hambriento y pesado de beomgyu sobre mí. Su mano no tardó en llegar bajo mi boxer y frotar toda la zona con sus dedos mientras sus labios se movían ágilmente sobre los míos, mordió mi labio soltando un gruñido mientras tiraba de él, suspiré pasando mis manos por su espalda arrugando su camisa tomando los bordes de ésta tirando hacia arriba esperando sacarla.
Botó la parte baja de mi atuendo al suelo pegando toda su mano a mi entrada introduciendo dos dedos húmedos.
-beomgyu, no... oh...
Mis piernas se abrieron a sus costados mientras mi cadera se movía hacia adelante buscando más de esa sensación tan embriagadora. Logré sacar su camisa deleitando mi vista con sus abdominales bien marcados, arrastré mis uñas desde su pecho dejando líneas rojas por este hasta llegar al short que portaba e introducir mi mano, deshizo nuestro beso tomando entre su mano mi pene bombeándolo.
- Solo quítatelo - susurré al no poder retirar sus shorts.
-¿Estás listo para todo lo que hay ahí dentro? -se burló.
Me quejé mientras gruñía y tiraba de su nuca hacia mí para probar sus labios de nuevo, el calor de su cuerpo se alejó de mí. Parado frente a mí saco el resto de la ropa que portaba dejando su miembro erecto ya fuera, retrocedí en la cama hasta topar con la cabecera y el sonrío ante el acto, subió de rodillas tomando mis tobillos obligándome a quedar recostado frente a él a toda su merced.
Sus manos se deslizaron por todos mis muslos hasta mis nalgas levantando mi cadera entrando poco a poco, sus ojos se cerraron inevitablemente y gruñó al sentirse totalmente cubierto, mis piernas se flexionaron involuntariamente ante su invasión, sujetó la cabecera con ambas manos moderando su respiración al ritmo de las embestidas que daba. Se detuvo sin salir por completo, lo mire extrañado notando el sudor de su frente, sus mejillas sonrojadas, su abdomen contrayéndose tratando de normalizar su respiración; tomé la cabecera con mis manos a la vez que envolvía mis piernas a su cadera, comencé a moverme contra su cuerpo lo más rápido posible.
-Mi amor, sí, sigue así...
Jadeó sin dejar de verme a los ojos, su mirada se centró en mis pezones erectos, bajo una mano colocándola sobre mi erección volviendo a golpear su cadera con la mía. Solté un gemido mientras me retorcía debajo de él, la oleada de placer invadía cada parte de mi cuerpo provocando ligeras convulsiones en mi vientre extendiéndose a mis piernas.
-beomgyu, más lento...
Haciendo caso omiso a mis súplicas embistió con más rudeza, mis piernas temblaban cual gelatina, sus brazos fueron a mi espalda tirando de ella hacia adelante dejándome sentado sobre él, sonrió al ver mi cara desecha y roja, lo fulminé antes de pegar mis labios a los suyos cuando sujetó mis muslos entrando y saliendo tan rápido que me arrastraron de vuelta al orgasmo en pocos segundos, ya no eran gemidos los que salían de mi boca, se habían convertido en gritos para que se detuviera, mi cuerpo temblaba excesivamente contra su pecho, salió de mí al momento en el que comenzó a correrse contra mi cuerpo. Abrí los ojos notando su espalda llena de líneas rojas, retiré mis dedos viendo debajo de estos viendo las líneas.
-¿Te divertiste rasguñando mi espalda?-recargó su frente en la mía- ¿crees que soobin nos haya escuchado?
-Creo que todo el piso nos escuchó...
-¿Estás seguro de esto?
-Claro, el detective más reconocido de Daegu rescatando al chico secuestrado hace casi un año. ¡Imagina ese dinero! ¡La fama!
-Siendo honesto, no creo que él quiera ser rescatado, llevan follando más de media hora.
-Me da igual, incluso imagina esto. "Secuestrado se casa con su rescatista."
-Estás loco.
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