Capítulo 8

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Abrió los ojos lentamente intentando estirarse pero en vez de relajarse sintió como su estómago se revolvió y todo su contenido subía por su garganta, por lo que en un acto totalmente veloz se levantó de un salto para correr al baño y botar todo lo que había bebido la noche anterior.

Una vez se sintió mejor se sentó en el piso luego de tirar la cadena mientras se agarraba la cabeza debido a la resaca.

Suspiró e intentó recordar qué había hecho la noche anterior, Pieck le había dicho que tomara shots con desconocidos, jugaron verdad o reto, Connie y Sasha experimentaron mezclando licores y...luego no recordaba nada. De hecho ni sabía cómo llegó a casa.

Se puso de pie y lavó su boca en el lavamanos, el sabor era asqueroso y necesitaba tomar una pastilla para la cabeza que le palpitaba como nunca. Por eso odiaba embriagarse.

Refregó su cara con la palma de su mano mientras salía del baño con dificultad debido a que su cabeza daba vueltas.

— Estás viva. -Dijo una voz a su lado haciéndola brincar.-

Ymir miró a su lado para encontrarse con Historia quien la miraba con una ceja levantada.

— ¿Hisu? ¿Qué haces aquí?

La rubia suspiró y caminó hasta la cocina para sacar una Gatorade y una pastilla para la resaca.

— Te estuve llamando toda la mañana pero no contestaste. Vine porque me preocupé pero descubrí que estabas bastante bien. -Dijo mirándola de reojo de forma despectiva.-

Mientras su pareja hablaba Ymir revisó su teléfono y en efecto, tenía llamadas perdidas de la bajita. También notó que eran las tres de la tarde y... que Historia la había invitado a comer.

— Mierda, Tori…

— Ya, no excusas. -Dijo suspirando.- Debí haber preguntado si harías algo en la noche con tus amigos.

— ¡N-No! Se supone que no haría nada pero Reiner dijo que Annie iría y Pieck eligió un buen lugar y…-Suspiró derrotada.- Perdón.

Historia la miró extrañada.

— ¿De qué te disculpas? No eres mi carga y no soy tu madre. -Rodó sus ojos para luego acercarse y tomarla de la camisa para quedar frente a frente con la más alta.- Pero soy tu novia y quizás esté un poco celosa por esa marca de labial en tu cuello.

Ymir se heló y corrió al espejo de la entrada del departamento, labial corrido había en su cuello. ¡¿Cómo?! Mientras se lo quitaba intentó recordar qué había pasado la noche anterior pero no recordaba nada después del segundo shot con esos desconocidos en la mesa del lado.

La morena empezó a frustrarse, debía preguntarle a Annie en el gimnasio qué había ocurrido, si hizo algo que perjudicaría su relación con Historia no podría verla de la vergüenza y culpa.

Historia por su parte estaba en el sillón sentada con sus rodillas en el pecho mientras veía televisión, la verdad no estaba para nada interesada pero era mejor a tener que soportar la incomodidad y enojo en su cuerpo por aquella marca en el cuello de su pareja.

Si su relación fuera abierta como cualquier pareja normal, quizás podría salir con Ymir y así dejar en claro que tiene a alguien. No entendía cómo Ymir podía soportar el no poder hablar de su relación cuando ni ella misma no podía dejar de hablar sobre Ymir con sus compañeras de grupo o amigos.

Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando sintió el peso de Ymir a su lado en el sillón. Evitó su mirada, sabía que tenía su mirada fija en su rostro.

— ¿Por qué estás haciendo puchero? -Preguntó la más alta mientras Historia tenía su mirada fija en la televisión.-

— No lo estoy haciendo.

Behind The Spotlight || YumihisuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora