-¿Tu quieres estar conmigo Leila?
Nunca pensé escuchar esas palabras de Sebastian, por lo tanto nunca redacté mentalmente una respuesta. Pero ¿a quien engaño? claro que quiero estar con el, nunca me perdonaría a mi misma si dijera que no. Pero ¿Y la amenaza de Madison? Ella podía ser muy cruel si quería podía simplemente decirle a sus "amigas" un par de cosas, y ellas simplemente estarían haciendo mi vida imposible, solo por mantener a Madison cerca de ellas y no perder su amistad.
-Leila... - me llamo Sebastian haciéndome volver a el, a nosotros debajo de un árbol y a su pregunta. ¿Me animaba a dejar a Madison y sus amenazas a un lado y decirle que si a este chico?
-Sí - Esperen ¿lo dije? ¿o solo lo pensé?
-¿Eso quiere decir que si? ¿Aceptas? - Lo dije. Y no me arrepiento, al diablo Madison y sus amenazas yo quiero a este chico. Además no es como si me estuviera pidiendo que fuera su novia ¿o si?
-Bueno no lo sé, primero debes pedirle mi mano a mi padre - bromeé. Pero Sebastian no lo tomo como una broma y comenzó a rascar su nuca y mirar hacia todos lados notablemente nervioso.
-¿E-enserio?
-Si claro, y tienes que pasar una serie de pruebas que pondrán a prueba tu resistencia física, mental y hasta espiritual. - Okey, Sebastian estaba realmente entrando en pánico y yo comencé a reír como una demente. Su rostro paso del miedo, a la confusión hacia mi reacción. -T-tuviste q-que... v-ver tu-tu cara - logré articular entre carcajadas mientras aplaudía como estúpida.
-Eres tan tonta - río junto a mi. Y comenzó a hacerme cosquillas en mis costillas - Ahora no tendré piedad contigo.- Yo no podía parar de reír, malditas cosquillas.
-YA PARA POR FAVOR!! - hice un movimiento brusco para tratar de zafarme pero solo hizo que cayéramos al pasto, y Sebastian sobre mi. De repente sus cosquillas pararon y me di cuenta que estábamos demasiado cerca.
-¿Sabes que es lo más loco de todo esto? - dijo mirándome a los ojos mientras yo intentaba respirar. ¿Por qué tenia que ser tan hermoso?
-No, dime - respondí
-Que no me importaría pedirle tu mano a tu padre ni hacer cualquier prueba para estar contigo. - dijo esto tan cerca de mis labios que, casi pude sentir como se rozaban. No podía creer que me estuviera pasando esto, no podía creer que este bromeando con un chico y hasta coqueteándole. No puedo creer que Sebastian me quiera como yo a el o que haya dejado a Madison por mi, ni que me estuviera diciendo todas estas cosas lindas.
-¿Estoy soñando? - le pregunté provocándole una sonrisa.
-Creo que el que esta soñando soy yo, bésame para saber si es real - Yo solté una carcajada y uní nuestros labios en un tierno beso, que de a poco se fue convirtiendo en un beso desesperado.
Me comenzaba a faltar el aire y no era solamente por el beso, ¡Sebastian me estaba aplastando!. Me separé solo unos centímetros.
-Sebastian - dije
-¿Si? - y me dio un corto beso en los labios.
-Me estas aplastando.
-¿Qué? Oh - se sentó y me tendió la mano para que puedo sentarme, pero cuando me senté me volvió a tirar y esta vez quede yo sobre él - lo siento.
-¿Estas loco? - reí
-Por ti - y me volvió a besar.
Estuvimos mucho rato así acostados uno sobre el otro, besándonos.
-Sebastián tenemos clase - dije entre besos.
-¿A quien le importa? -
-¿A mi futuro?
-A tu futuro no le afectaran un par de clases perdidas. - eso me hizo reír y comencé a batallar para soltarme.
-Solo un par de besos más
-Esta bien, solo dos- le di dos cortos besos en sus labios - ¿Listo?
-Oh vamos, eso no fue ni medio beso.
-Clases. - comencé a batallar para escaparme y sin querer mi rodilla dio en sus...
-Mierda. - Se quejó. ¿Partes íntimas? El caso es que aunque fue un accidente, funcionó. Logré escaparme y levantarme.
-Lo siento, lo siento - estiré mi mano para ayudarle a pararse.
-No pasa nada, solo la próxima vez apunta mas arriba - río. - ¿Vamos? - estiró su mano para que la tomara. ¿Quería que caminemos juntos de la mano? O no, ese es un gran paso.
-Espera, tengo que decirte algo.
-Te escucho
-¿Podemos mantener esto en secreto?
-¿Secreto?
-Si, ya sabes tu acabas de terminar con tu novia. Yo con mi "novio" no quiero que nadie salga lastimado- hice comillas con mis dedos - ¿entiendes? - Puede que Madison sea una arpía y quiera matarme, pero quizá realmente siente cosas por Sebastian y vernos juntos aumentará su sed de venganza. No es que tenga miedo, bueno si, lo tengo.
-¿Lo dices por Madison verdad? Liam ni siquiera era tu novio, no creo que le moleste.
-Sí, lo digo por ella.
-Esta bien - suspiro- guardaré el secreto. - Parecía algo triste, se le notaba en su voz. -¿Aún así puedo llevarte a tu clase de la mano verdad?
-No lo creo ¿Qué tal si alguien nos ve?
-Claro - lo dijo en un suspiro - alguien nos puede ver-
Y comenzó a caminar en dirección a la escuela, sin esperarme.
-Sebastian - le grite - ¿Estás enojado? - se dio la vuelta.
-¿Por qué? ¿Por qué no puedo mostrarle a todos que eres mi chica? No claro que no - ¿Eso fue sarcasmo? Y siguió su camino. Lo vi hasta que se perdió dentro de las puertas del edificio.
En seguida sonó mi iphone.
Mensaje Recibido Sebastian:
Lo siento, no quise decir eso. Perdóname ¿hablamos luego?.
Estaba a punto de responderle cuando una llamada entrante me interrumpió.
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¡NUEVO CAPÍTULO! ¿Eso fue rápido no? Pero es solo un capítulo corto, aunque es super lindo ¿no creen?
NO OLVIDEN DEJARME SUS COMENTARIOS, CUENTENME ¿QUE LES PARECE LA NOVELA HASTA AHORA?
...Y no olviden dejar sus votos!
Besitos Vale xoxoxoxoxox
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El primero
RandomLeila Rousse una joven de diecisiete años, tímida, algo rellenita, insegura y con amigas que son totalmente lo contrario a ella, afronta una vida sin su madre y con un padre algo ausente debido a su trabajo. Pero en un momento llega alguien a su vi...