HAZME SENTIR QUE ESTAS AQUÍ [RIVAMIKA]

CAPITULO FINAL

NOS DESPEDIMOS Y YO MORIBUNDO, DE VUELTA SIN TI, SIN LATIDOS, SIN ATISBO DE VIDA. ESPERANDO DESESPERADAMENTE VOLVER A VERTE, PARA SENTIRME VIVO.

DAVID SANT

¿Qué es la vida en sí? – en general, es el estado intermedio entre el nacimiento y la muerte.

Inespecíficamente: es la fuerza sustancial mediante la que obra el ser que la posee.

La vida humana es un paso que conduce al alma de la inexistencia a la plenitud eterna en un periodo de tiempo. O bien: es un estado de actividad. Existencia animada de un ser o duración de esa existencia.

Ciertamente hay muchas definiciones acerca de lo que es vida, sin embargo, casi nadie es capaz de comprender lo que realmente significa. Podemos decir que alguien está vivo si este respira, se mueve o simplemente existe, no obstante, la vida es mucho más que eso, o, también puede que sea lo contrario y sea solo una especie de puente que te lleva a lo desconocido.

*-*-*

- ¿Por qué no puedes quedarte? – fue la pregunta que el hombre le dijo a su joven esposa que yacía junto a el mientras la tomaba del brazo y daban una ligera caminata. – o ¿es acaso un castigo por ser tan mal marido? – Levi quería saber la verdad, pues, en ese momento Mikasa estaba con él, y no podía comprender por qué tenía que irse después.

- no Levi, no es ningún castigo, yo más que nadie quisiera estar junto a ti para siempre, quedarme y disfrutar de este amor que aun te profeso. No te guardo ningún rencor, pues, ahora entiendo que lo errores son parte de este mundo.

- ¿entonces? ¿Qué es lo que te detiene? Tan solo quédate y ya. – le exigió. – comencemos de nuevo, déjame demostrarte lo mucho que he cambiado.

- hay cosas de las cuales aún no tenemos conocimiento, leyes físicas y espirituales que no comprendemos todavía. – mientras hablaba se alejó unos pasos de él y deteniéndose, aspiro el aire fresco llenando sus pulmones, admirando la vista que en ese momento era espectacular.

- no te entiendo, lo único que te pido es que te quedes así, tal y como estas.

- escúchame Levi, si te lo explico, tal vez no lo entiendas.

- ¡¿Qué tal vez no te entienda?! Ja. Estuve conviviendo con un ser desconocido que poseyó tu cuerpo durante mucho tiempo, soportando todas y cada uno de sus caprichos, estuve a punto de volverme loco. Ya nada puede sorprenderme, incluso ahora los fantasmas tienen más sentido para mí.

- jeje. – rio con suavidad. – espero que Ymir no te haya dejado con secuelas, ella era muy brusca.

- tuvimos muchas peleas, la verdad, es que, yo solo quería volverte a ver; tan solo esperaba la noche para que ella durmiera y así poder contemplarte, solo así me hacían sentir que tú estabas ahí. Ahora que te tengo, la idea de perderte de nuevo es insoportable, no te pido nada más, tan solo que estés aquí.

Mikasa vio una banca en el que podían tomar un descanso, así que fue hasta ella y se sentó, haciéndole espacio a Levi. Con su mano le hizo señas para que este se sentara a su lado y por supuesto el accedió. La pelinegra lo tomo de la mano y apretó ligeramente, Levi entrelazo sus dedos con los de ella, así quería estar, jamás soltarla como anteriormente lo hizo.

- Acércate más. – le dijo ella. – pon tu cabeza en mi hombro. – pidió.

- Claro. – este sin más lo hizo, inhalando el dulce aroma de su mujer. Así estuvieron por un buen rato, disfrutándose el uno del otro, hasta que el azabache rompió el silencio.

- Aun no has respondido mi pregunta. Quiero, aunque sea una explicación.

- Está bien, pero, presta atención.