prólogo

348 33 2
                                    

Era un día lluvioso, estaba terminando su investigación, tan cerca de conocer la verdad, o eso era lo que sentía en su corazón.

Más bien eso era lo que estaba pasando, estaba cerca de encontrar el cuerpo de un joven el cual llevaban buscando desde hace años, ellos también lo sabían, sabían que estaba peligrosamente cerca de desenmascarar su fechoría.

¿Que es lo que la gente hace cuando no quiere ser descubierta?

Se esconde, pero eso ya no servía, no más, entonces tenían que tomar medidas extremas, así lo hicieron, el estaba cerca, si tanto quería conocer el lugar donde el cuerpo estaba y a las personas que lo habían matado así lo haría, mas cerca de lo que creía.

Sabíamos que lo encontrarias - miró a la cara a aquellas personas, aquellas personas aue conoció en aquel pueblo tan pequeño, tenía sus sospechas pero no había pensado muy claramente que podían ser ellos - me agradabas - habló la mujer del grupo - pero si tanto quieres encontrarlo, adelante no te detendré.

Un golpe en la cabeza fue lo último que sintió, y lo último que sentiría afortunadamente, al estar inconscientemente no sintió el dolor de los golpes que le siguieron y los huesos que le rompieron, todo el, irreconocible ante el mundo.

Todo acabo, aunque el no lo sabía, ni siquiera supo que murió.

Experiencias paranormales Donde viven las historias. Descúbrelo ahora