4

907 133 160
                                    

Ya habían pasado cuatro días desde que Harry entro al colegio.

Hoy Viernes era un nuevo comienzo, pero el no tenía ganas de despertar. Entro James a su habitación y lo sacudió gentilmente.

—Hijo ya despierta, se te hará tarde para ir al colegio—

Harry se movío un poco y quedó boca arriba —¿habra algún problema si hoy no asisto, papá?—

James lo miro frunciendo el ceño — ¿Y eso? ¿Estás bien hijo?—

—Bueno no, me siento un poco mal—

Y con mal se refería a pésimo, aún recordaba la horrible broma que le habían hecho sus compañeros.

Harry entro a su salón un poco más tarde de lo normal, pero como no había escuchado nada creyó que todavía no llegaban sus compañeros.
Fue a sentarse a su lugar pero no sintió su máquina, escucho bufidos y respiro profundo. Era ciego pero no sordo, era evidente que ya habían ahí varias personas.

—¿Quien está ahí? No es gracioso esto— se levantó y empezó a tantear las butacas provocando más risas. A Harry se le rompió el corazón al darse cuenta que no eran unos pocos, era todo su salón haciendole la broma —Por favor, regresenla

—Esta aquí Harry ¿Que no la ves?— una furia invadió todo el cuerpo de Harry.

—Draco, por favor—

—Pero si yo no la tengo, mira— más risas.

Harry iba a salir pero una mano rodeo si muñeca.

Regresala Draco—

—vamos tori, es una broma—

—yo no le veo la gracia, anda, devuelvela

—que aburrida eres Astoria—

Harry se quedaba quieto escuchando todo, la mano lo jalo suavemente. Sintió como la chica lo sentaba en una butaca

—ten, ya está aquí tu máquina—

—Muchas gracias...—

—Astoria, dime tori—

—Tori, muchas gracias— escucho a la chica reír, que bonita risa tenía.

—A partir de hoy te ayudaré en lo que ocupes ¿Si? Seré tu amiga—

Harry sonrió y su día mejoró un poco, aún así no pudo olvidar como todo su salón le hizo una broma, al parecer nadie lo quería ahí.

—¿Harry?—

—¿Eh?—

—¿De verdad te sientes mal?—

—eh...un poco si— James se quedó en silencio y eso puso a Harry nervioso, a veces tenía que tocar su brazo para saber si seguía ahí

—Te están molestando ¿No?—

Harry se puso nervioso, pero James no lo noto —Claro que no, solo... papá estoy cansado—

—a penas una semana y ya no quieres estudiar...que poco soportaste hijo—

—¿Me dejaras faltar?—

—no— Harry formó un puchero y sintió como James apretaba su nariz suavemente —anda, arreglate que no quiero que llegues tarde—

Harry bufo y a su pesar se levantó para empezar a arreglarse. Un día más soportando a Draco y a sus patéticos amigos.

Cuatro Sentidos|| DrarryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora