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Al día siguiente Yeonjun estaba reconsiderando su decisión de ir con Beomgyu, el no podía manejar la sensación de estar cerca de ese chico, la noche anterior la pasó pensando en él, acaso es posible pensar tanto en una persona con la que has convivido menos de dos horas.

La puerta se abrió y los pensamientos de Yeonjun fueron interrumpidos, era Chan.

—Buenos días— dijo con voz alegre y los ojos medio cerrados.

—hola, pareces contento.

—lo estoy, será un gusto distraernos un poco y conocer al chico que mencionaste— dijo sonriendo.

—oh, ¿que debería ponerme?— Yeonjun pensó tanto en Beomgyu que se olvido de que tendría que lucir bien.

—ponte lo que sea, se te verá bien— Chan tenía razón el se vería bien con lo que fuera, peroYeonjun no se pondría cualquier cosa él tendría que impresionar a los demás.

Al final se decidió por una camiseta blanca de manga siza con un pantalón rojo,simple pero se le veía muy bien.

Salió de la que era su habitación para dirigirse a la cocina, muchos angeles estaban por ahí disfrutando de la vida y escuchando música, él no era realmente un fan de la música, Dios decía que la música humana era mundana y no debía ser escuchada, claramente Yeonjun le obedeció en eso, no le importaba lo increíblemente buena que sonara el pop, el rock o cualquier género musical, el no podía disfrutar ese tipo de cosas.

Al llegar a la cocina vio a Kai, ellos no eran tan amigos pero se llevaban bien, junto a el estaba Chaeryeong, una de sus mejores amigas.

—Jun, ¿me vas a llevar cierto?— dijo la pelirroja apenas lo vio.

—hola Chae, no creo que pueda— dijo con tristeza fingida.

—Chan le dijo que si podía— Kai se metió en la conversación.

"Maldito" fue lo que pensó Yeonjun antes de darse cuenta de que había maldecido y eso está mal.

—¿entonces si puedo ir yeonjun?— estar en esa casa y salir solo por trabajo era realmente aburrido, Chaeryeong quería divertirse

—bueno creo que si— Yeonjun no quería llevar muchas personas y terminó invitando una más, bien hecho Yeonjun.

Un rato después salieron hacia el lugar de la reunión, iban cinco personas, cuatro relajadas y una a punto de devolverse a su habitación, encerrarse y no salir hasta que fuera momento de volver al cielo.

Ya en camino toda clase de pensamientos negativos llegaron hacia la mente de Yeonjun, el no entendía el porque, pero se sentía asustado de no agradarle a Beomgyu, ridículo ¿no creen?

Les tomó casi una hora llegar al lugar, el cual era hermoso, un edificio que tenía una gran terraza en donde estaba los invitados, al parecer Beomgyu era dueño de uno de los apartamentos más altos.

Al entrar a la reunión se dieron cuenta de varias cosas, no era como lo imaginaron, había menos gente de la esperada, había mucha comida, la música era increíble y la mayoría eran demonios.

—Demonios— fue lo único que pudo decir Chan antes de que todos los invitados notaran la presencia de las cinco personas recién llegadas.

Take me to the hell | YeongyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora