Sodio [Junghope]

[18]

—Uh, hoy fue un día agotador—Comentó Somin dejando su bolsón sobre la cama del pálido, quien se encaminó a dicho lugar y se dejó caer en el mismo, disfrutando de la suavidad de sus almohadas.

—¡Dioses, no volverá a ir a ningún evento de Young Sun!—Expresó en voz alta y la puerta de su habitación se abrió con brusquedad, apareciendo su hermana mayor, quien tenía cara de pocos amigos.

—¿Qué has dicho Min Yoongi?—Cuestionó con molestia y el pálido se levantó de la cama.

—¡Lo que escuchaste, tus eventos casi siempre son un desastre!—Respondió mirando mal a su hermana.

—¡No es mi culpa que Jimin haya aparecido allí!—Intentó defenderse y se cruzó de brazos.

—Sé que no, pero si nos hubieras dejado irnos cuando él apareció no hubiéramos pasado por una situación tan incómoda—Reclamó el pelimenta observando a Somin—¡Mira nada más los rasguños que tiene en los brazos, ese tonto casi la mata!—Exclamó y la pelirroja abrió los ojos exageradamente al recordar que no bajó las mangas de su suéter.

—¡Ya me disculpe con ella ¿Ok?!—Respondió Young Sun todavía molesta.

—Uh yo creo que lo mejor es que me vaya—Comentó Somin tomando su bolsón.—Yoongi, no culpes a Young Sun, ninguno sabía que esto podía pasar, en todo caso fue mi culpa, quién tenía que irse de la exposición en cuanto Jimin apareció era yo—Razonó antes de que el pálido dijera algo.—Me disculpo por todo—Dicho esto avanzó en dirección a la salida del sitio decidida a marcharse.

—¡Ni un paso más Jung Somin!—Se quedó quieta ante la voz de la hermana mayor del pelimenta.—Vamos a curarte esas heridas, si tus padres te ven así nos matarán—Aseguró.—No es pregunta—Expresó al darse cuenta de que la joven quería negarse.

Más tarde, después de que Young Sun curara a Somin, la mayor le ordenó darse una ducha y le prestó un cómodo pijama, siendo esa su invitación para pasar la noche en el lugar.

—Mañana empezaré el trámite para irme al extranjero—Comentó Somin jugando de manera nerviosa con sus manos y Yoongi dejó de escribir en su cuaderno para observarla fijamente.

—¿Estás segura? ¿Tus padres saben de esto?—Preguntó con seriedad y la joven asintió.

—Estoy completamente segura, es una buena oportunidad, papá lo sabe y...—Detuvo sus palabras por un momento.—Está de acuerdo, también le mencioné que también conseguiste la beca y dijo que estaba dispuesto a apoyarte con los gastos.

—¡Somin, ya te dije que-

—Lo sé—Interrumpió—No lo dije para presionarte, simplemente estoy contándote la opinión de mi padre—Le sonrió.—Si decides venir conmigo tienes todo el apoyo de mi familia y mío— Aseguró—Y si no, vendré a visitarte en las vacaciones.—Prometió y el pelimenta sonrió.

—Te esperaré entonces.

—¡La cena ya está lista!—La exclamación de la señora Min se hizo oír y ambos jóvenes se pusieron de pie, avanzando con rapidez en dirección del comedor.—¡Somin, cariño es un gusto tenerte por aquí!—Comentó la mujer con una gran sonrisa.—Preparé tu comida favorita—Avisó mientras observaba a Somin ayudando a sus hijos para preparar la mesa.

—Muchas gracias señora Min, es un gusto para mi venir aquí—Respondió la pelirroja con una dulce sonrisa.

En ti encontré un lugar seguro.

[...]

Somin caminaba tranquilamente por los pasillos de su facultad con un sobre en manos, había faltado a sus clases ya que con Yoongi despertó hasta cerca del mediodía, tenía un sin fin de llamadas pérdidas de Hoseok y unas cuantas de Jisoo, quien le exigía verla al final de sus clases, asegurando que debía decirle algo importante.