El gran harem de T/N

Capítulo 1

T/N se levanta a las 5:40 a.m. para poder bañarse y arreglarse para ir al trabajo. Sale a las 6:20 a.m. Para llegar a tiempo al trabajo ya que se encuentra muy retirado de donde vive porque la renta es muy barata.

Se sube al transporte público lleno de gente que igual va a trabajar temprano, T/N siempre tiene una cara seria y no muestra ninguna emoción.

Al fin llega al trabajo a las 8:10 a.m. ya que el transporte se retrasó un poco, así que sube corriendo a su escritorio deseando que su jefe aún no haya llegado. "Por favor, por favor..." pensaba.

Llegó a su escritorio y suspiro aliviada al ver que no estaba su jefe.

-¡T/N! -grita su jefe detrás de ella, t/N se sobresalta y voltea para saludarlo.

-Buenos días señor-lo saludó.

-Haz llegado 10 minutos tarde, te quedarás a hacer más papeleo-le dijo enojado, t/N sólo asintió y suspiró pesadamente cuando se fue.

"¿Por qué siempre se fija en mi y no en los demás?" pensaba enojada. Un ejemplo claro de eso es su compañera de en frente, una mujer elegante y siempre arreglada que llega media hora tarde y nadie le reclama.

Así pasó el día tan largo, t/N hacia reportes e informes todo el tiempo.

"Bien, he acabado y apenas son las 9 p.m." pensaba. Se levantó de su asiento y los llevó a su jefe.

*Toc Toc*

-Pase- se escuchó. t/N pasó -Señor, aquí le traigo los informes que me pidió - mientras los dejaba en el escritorio.

-Déjame verlos-dijo para después hojearlos y se notaba una cara de disgusto. -¿Qué es está porquería? -le gritó mientras azotaba los documentos en el escritorio. T/N se asustó y estaba cabizbaja.

-Repítelo- le dijo.

-P-Pero señor, ya no me dará tiempo... - dijo t/N pues los informes eran para mañana a primera hora.

-¡Repítelos! -le gritó mientras le aventaba las hojas y una de ellas le rasguñó la mitad de la mejilla.

-Sí, señor-dijo t/N para después ir al escritorio mientras sacaba una pequeña venda y ponerla en su mejilla.

-Mira, parece que el jefe la regañó de nuevo-susurraban sus compañeros de trabajo. -Lo hizo mal otra vez, es una estúpida -dijo otra compañera.

T/N claramente escuchaba todo y sólo los ignoraba. Veía como sus compañeros salían poco a poco y felices por haber acabado. Eran las 10:30 y un compañero de ella se acercó y le dejó un pequeño dulce para que tenga algo de azúcar, lo puso lentamente en su escritorio y se retiró. T/N sólo lo ignoró, estaba muy concentrada en terminar que no lo notó.

*11:30 p.m.*

T/N suspiró pesadamente y se estiró en su asiento, todo estaba apagado menos su computadora.

-Al fin terminé -dijo aliviada, arregló los papeles y los dejó ordenados en el escritorio del jefe y luego se retiró hacia su casa.

-Tal vez debería de comer un sándwich de la tienda y ya, espero siga abierta- t/N se subió al último transporte e iba todavía lleno aunque fuera tarde, estaba siendo aplastada por tanta gente, era algo común que siempre le pasaba. Al fin llegó a su parada y tenía que ir caminando ya que no suelen pasar ya muchos taxis, aliviada de ver la tienda abierta se compró su pequeña cena y se fue con dirección a su casa.

Balanceaba su bolsa mientras llegaba al piso de su apartamento pero se paró en seco al ver a una mujer grande frente a su puerta, hizo una mueca de disgusto al verla.

-Al fin llegas t/N- le dijo enojada su madre.

-Salí tarde del trabajo-le respondió sin ninguna emoción.

-Sí, sí, ¿no me vas a invitar a pasar? -le preguntó.

-¿Qué necesitas, madre? -le preguntó t/N sin hacerle caso.

-Lindos modales, así no te educamos-le dijo asqueada.

-Nunca me educaron... -susurró para ella misma pero su madre la había escuchado.

-¿Qué dijiste, mocosa inútil? -grito furiosa y le dio una cachetada justo donde se había rasguñado con la hoja en el trabajo, esto hizo que se abriera un poco la herida y saliera una pequeña gota de sangre.

-Todavía que me desgasté criandote y gasté mi dinero-le resongaba. "Yo misma me ganaba mi dinero para comer..." pensaba mientras miraba el piso con ojos vacíos.

-De verdad que eres inútil t/N, de todas formas sólo sirves para darnos dinero, así que a eso vine, dámelo -le dijo mientras extendía su mano.

-P-Pero si te lo doy no podré pagar mi renta de este mes-dijo t/N.

-Esas son sólo excusas para no darnos el dinero, ¿que acaso no quieres que tus dos pequeños hermanos tengan sus útiles para la escuela? -dijo indiferente.

-Lo siento, p-pero no puedo, pídele a Alex, él tiene una mayor paga-dijo nerviosa t/N.

-Tsk, de verdad que no sirves para nada, vendré por él mañana temprano-dijo para luego darse la vuelta e irse.

T/N no pudo decir nada más para impedir eso pero no puede ya que tiene ese trabajo gracias a su padre que era amigo del jefe, entonces podrían correrla si su padre lo dice.

Se metió a la casa sin ganas, ya no tenía nada de apetito, así que se fue a recostar en su cama; miró el techo y rompió en llanto, su vida era un asco y nadie la quería ni se preocupaban por ella, el único consuelo que tenía era ver chicos de anime en su celular, siempre le sacaban una sonrisa.

Prendió su celular para ver las fotos guardadas de ellos mientras lloraba más fuerte.

-Si tan sólo...existieran... -susurraba llorando mientras abraza su celular y lo agarraba con tanta fuerza.

Y así t/N cayó dormida con lágrimas en los ojos y el sonido de los pájaros cantando la despertaron.

T/N abrió los ojos y vio un cielo azul, se levantó lentamente y vestía un lindo vestido blanco muy lindo y alrededor tenía flores. "Estoy en un ataúd" pensó inmediatamente.

Miró al frente y se sorprendió a ver a varias personas vestidas con ropas negras y mirándola con mucha sorpresa.

-¿Qué carajos...? -se preguntó.

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Hola! Espero les gusté mi historia 0w0, si tienen comentarios con gusto les contestaré.

Cuídense mucho.