Nunca Más: Epílogo

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Dayana se encontraba sentada en el sillón mientras los papás hablaban con los policías. Las amigas se encontraban recogiendo las cosas de su amiga, y Janne se acercaba a hablar seriamente con la castaña después de la tormenta que vivió.

—Oye, Dayana —le habló con un tono suave—, de casualidad, ¿conoces a un chico llamado Ángel?, va en tu secundaria, o creo que iba en tu secundaria. ¿Sabes algo de Ángel Dalesioni?

—¿Cómo era él? —preguntó curiosa.

—De cabello oscuro, estatura como de 1.65, piel morena, y creo que usaba lentes, no estoy segura —describió a quien buscaba—. Lo estaba buscando en tu secundaria, por eso me encontraba ahí la vez que nos conocimos.

—Creo que no, perdón, puedo preguntar —dijo.

—Claro —se retiró—. Espera, una última cosa.

Sacó un celular y le mostró un grafiti ubicado en la barda de su secundaria. Era algo misterioso, un grafiti perfectamente hecho que representaba una estrella de doce puntas, estaba tan bien dibujado que Dayana pensó que la escuela lo puso ahí.

—¿Has visto este grafiti? —preguntó Janne.

—Sí, está en mi escuela. Hace unos meses no estaba, apenas lo pintaron a principios de este año. Está tan bien hecho, no puedo dibujar ni una estrella de cinco puntas y alguien dibujó una de doce, ¿tiene algo malo?

—Mi novio lo vio y se asustó demasiado, no sé por qué, hablaré con él. Te contaré luego, ¿vale?, me tengo que ir, cuídate —se despidió de la castaña—. Luego te compenso lo de tus galletas.

—Hasta luego, Janne, gracias por todo.

La noche caía. Janne llegó a su casa, su novio la había dejado en frente de su casa. Se desabrochó el cinturón y tomó sus pertenencias. Le agradeció a su novio, pero seguía algo dudosa del porqué su novio había estado insistiendo con un simple grafiti afuera de una secundaria.

—Oye, Adrián, ¿por qué te preocupa tanto el grafiti de esa secundaria?, no puedo dejar de pensar qué tiene de malo —preguntó con la mayor precaución posible, siendo respetuosa.

—Es un mal augurio, donde sea que esté la estrella de doce puntas es peligroso. Si ves una, aléjate, luego te explicaré por qué. Cuídate, amor, me saludas a tus hermanitos —se despidieron con un beso.

La pelinegra bajó del auto viendo cómo su novio se iba a su casa.

¿El vaticinio de su novio qué significaba?

Se dio la vuelta y caminó hacia el portón de su casa, cuando escuchó gritos, una discusión. La camioneta de su papá se encontraba ahí.

—No..., ¿por qué? —se impactó—, ¿por qué tenías que volver? 

NUNCA MÁS

Tú crees en el cruel amor

con aflicción que me da dolor.

A tus ojos débil soy y juras:

"te amo" haciendo sufrir.

Humillación, tanto llorar por ti.

Ya no es así, ahora sí, me iré muy, muy lejos.

Nunca más, no abrumarás

y sé que nunca más me he de quedar aquí contigo.

Creí en tu falso amor que borró mi color.

A mis ojos fuerte eres y juro:

"te amo" haciéndome sufrir.

Debo irme de aquí; dejarte por mí

mejórate a ti y déjame ir.

Ya no, nunca más.

Ya no, jamás.

Ya me cansé, ahora por mí

viviré y no sufriré.

Amar no es lastimar y si tú lo ves así

entonces no es aquí y debo irme.

A vivir y no sufrir.

El apego atenuar y continuar.

Fue un gusto estar junto a ti,

pero nunca nos conocimos bien.

El amor no dolerá.

El amor no herirá

nunca, nunca.

Nunca, nunca

¡y nunca, y nunca más!

Humillación, tanto llorar por ti.

Ya no es así, ahora sí, me iré muy, muy lejos.

Nunca más, no abrumarás

y sé que nunca más me he de quedar aquí contigo.

Estoy conmigo. 

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HOLAAaAAAaAAA

como estan q me cuentan, bueno esta fue la historia q escribi y q me dio pena subirla, prometo escribir algo más ligero la próxima vez :(( 

la siguiente historia sera explorando el personaje del novio de Janne

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Aquellas Máscaras: Libro 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora