-Verónica definitivamente esto es una locura. ¿Qué hago yo en Escocia?- Dijo Sandra dejando la taza de café sobre la mesa y sentándose frente a su amiga en la cafetería del aeropuerto.
-¿Cómo que, qué haces tú en Escocia? Pues tirarte a un pedazo de highlander y olvidarte del capullo de Arturo.- Contestó Verónica provocando la risa de Sandra.
-Pues como no viajemos en el tiempo, lo tengo difícil para conocer a los highlanders que leemos en las novelas. Además, sabes que yo no soy así- Dio un sorbo a su café.
-Sandra tú no sabes cómo eres. Llevabas con Arturo desde los 13 años, tienes 35 y solo has estado con él, así que date la oportunidad de saber verdaderamente cómo eres. Cuando conozcas a un escocés buenorro que te eche el polvo de tu vida y te tiemblen hasta las pestañas, entonces me cuentas- Se echó a reír cuando Sandra puso los ojos en blanco.
-¡Eres imposible!- Miró el reloj- No sé como Mar y Carmen han decidido venir tan justas de tiempo, mira que son tranquilas.
-Bueno no te preocupes que llegaran bien, ya verás. Nosotras terminamos de desayunar y buscamos tranquilamente la puerta.
El vuelo salía a las siete y media de la mañana.
Sandra y Verónica habían ido al aeropuerto directas del trabajo, ya que estaban de turno de noche y les fue imposible cambiarlo, pero salieron una hora antes; así que a las cinco y media estaban allí. En cambio Mar y Carmen decidieron quedar sobre las seis y media, estas creían que iban con tiempo suficiente así que no cambiaron de idea, para desesperación de sus amigas que pensaban que era demasiado justo.
Terminaron su café y tranquilamente se dispusieron a buscar la puerta de embarque.
-Sandra ¿seguro que está por aquí? yo creo que nos hemos equivocado- Volvió a comprobar el billete y mirar las pantallas del aeropuerto. - Aquí no aparece nuestra puerta.
-Pues tiene que ser por aquí, mira vamos a preguntar a la de seguridad - Se dirigieron las dos hacia la chica que estaba cerca de ellas.
-Perdona ¿podrías indicarnos donde está nuestra puerta?- Tendió el billete a la trabajadora del aeropuerto.
-Os habéis equivocado, está en la otra punta, nada más salir del control de seguridad.- Devolvió el billete- Creo que es mejor que paséis por aquí, porque vais con poco tiempo- Abrió un panel que estaba a pocos pasos de ellas. Al ver la cara de espanto de las dos amigas, sonrió tranquilizándolas -si corréis seguro que llegáis.
En ese momento sonó el móvil.
-¿Pero se puede saber dónde estáis? Acaban de abrir la puerta de embarque ¿Pero no se suponía que veníais con tiempo de sobra?- Preguntó Carmen levantando la voz.
-Ya llegamos- Contestó Sandra casi sin resuello a causa de la carrera.
Verónica no podía dejar de reír mientras recorrían el aeropuerto como locas.
-¡Si seremos capaces de perder el avión, y nosotras quejándonos de Mar y Carmen, que desastre!. Esto es una señal, no tengo que ir a Escocia.- Decía Sandra sin aminorar su paso.
-Déjate de tonterías y ¡corre!. ¿Qué preferirías estar llorando por los rincones por el capullo de tu ex? ¡Vas a pasar un fin de semana de puta madre con tus amigas, así que déjate de chorradas!- Levantó la voz Verónica para que su amiga la escuchara, puesto que iba tras ella.
Volvió a sonar el teléfono, pero esta vez no contestaron, era contestar o correr. Cogieron un poco de aire al pasar frente al control y presentar el pasaporte a los agentes, para una vez franqueado volver nuevamente a la carrera. Ver cómo la gente las miraba, las hizo volver a reír a carcajadas.
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REDESCUBRIRSE. +18. #COMPLETA#
RomanceTras la separación de Sandra. Verónica, Mar y Carmen deciden hacer un viaje a Edimburgo que cambiará sus vidas. Descubrirán sitios maravillosos y se verán envueltas en situaciones extrañas al no conocer el idioma. Verónica y Sandra vivirán la pasión...