Corazón de melón fanfic: Los fantasmas del pasado

Capítulo 5

Era sábado por la tarde, Carrie escuchaba música tumbada en la cama. Buscando por internet había encontrado algunas canciones del grupo de Lysandro y Castiel y le parecía buena idea saberse el estribillo de alguna, así el concierto sería más ameno.

Sonaban bien, tenían un estilo menos agresivo que hacía años y habían refinado sus melodías. Aún así, la voz de Lysandro seguía siendo igual de poderosa y los acordes de la guitarra de Castiel retumbaban por la habitación.

Violeta asomó la cabeza tras la puerta y Carrie bajó el volumen de la música.

- ¿Aún estás así? ¡El concierto empieza dentro de media hora! - Carrie miró el reloj, ¿cómo podía ser tan despistada?

Se puso lo primero que encontró y cubrió sus ojeras con un poco de maquillaje, había pensado en arreglarse más pero definitivamente no había tiempo. Lanzó un suspiro mientas salía de casa, ¡vaya desastre!

Llegaron al bar y pidieron unas bebidas en la barra, el concierto aún no había comenzado pero los chicos ya preparaban las pruebas de sonido. Carrie estiró el cuello tratando de ver a Castiel pero noparecía estar ahí.

- ¡Carrie, Violeta! - Ambas se giraron en dirección a la voz que las llamaba, era Iris. - ¡Qué casualidad! ¿Cómo vosotras por aquí?

- ¡Hola, Iris! Lysandro me mandó un mensaje invitándonos a venir, ¿y tú?¿ Sueles venir a sus conciertos? - Preguntó Carrie con curiosidad. No imaginaba que Iris tuviera tan buena relación con los chicos, no pudo evitar una punzada en el estómago.

- De vez en cuando, suenan genial ya lo veréis.

Las tres dejaron de hablar cuando el sonido de una guitarra eléctrica rasgó el aire. Ahí estaba Castiel, con la mirada fija en las cuerdas y rasgueando con fuerza. El concierto comenzó y Carrie no podía apartar la vista del joven.  Todo el mundo comenzó a vitorear y a empujar a su alrededor, tratando de acercarse más al escenario.

Iris parecía saberse la discografía entera, ya que cantaba a voz en grito cada una de las letras. Carrie se contagió de su entusiasmo uniendose a ella en los estribillos que recordaba. De pronto un acorde de guitarra sonó fuera de tono  y Carrie levantó la vista para encontrarse con la mirada fija de Castiel que casi la quemaba, aunque un segundo después le pareció haberselo imaginado, ya que el guitarrista había retomado impecablemente su melodía sin prestarle atención.

El concierto continuó sin que Castiel volviera a levantar la vista de su guitarra, incluso cuando Lysandro les dedicó una canción expresamente a ellas, el chico continuó ignorándola.

Finalizado el concierto Iris las arrastró hacia el escenario para poder hablar con los chicos. Carrie se acercó automáticamente a Lysandro.

- Ha sido genial, Lysandro, habéis mejorado muchísimo. - Dijo la chica sonriendo.

- Muchas gracias, Carrie. - Carrie iba a continuar hablando con él pero una de las componentes del grupo se acercó a Lysandro y se lo llevó hacia la barra del bar.

Carrie se vio sola en medio del escenario, no había rastro de Violeta ni de Iris... sólo estaba Castiel guardando su guitarra en una inmaculada funda de cuero. Carrie dio un largo trago a su bebida y respiró hondo, había llegado el momento.

- Hola... - murmulló, se sonrojó por lo patético que había sonado. Tuvo la esperanza de que no la hubiese oído pero Castiel se giró.

- Pásame esos cables. - Gruñó Castiel de malas formas.

- ¿Qué?

- Los cables que estás pisando, pásamelos. - Carrie dio un respingo y se los tendió.

Castiel bebió de su cerveza y la miró de arriba a abajo.

- Si buscas a Lysandro está en la barra - dijo secamente.

- Ya sé donde está Lysandro, estaba buscandote a tí - respondío Carrie

En ese momento, una chica de las que habían estado saltando en primera fila se abalanzó sobre Castiel  y cambió la cerveza ya vacía del chico por una llena, quedandose colgada de su cuello.

- Pues parece que alguien me ha encontrado primero - contestó Castiel con una sonrisa nada agradable, rodeando la cintura de la chica con el brazo para apretarla más a él.

Carrie apretó los puños con indignación mientras les taladraba con la mirada. Se dió la vuelta indignada, dispuesta a buscar a Lysandro y a las demás. Les encontró brindando cerca de la barra.

-Carrie ¿Has visto a Castiel? - preguntó Lysandro con una mirada significativa.

- Está ocupado -contestó Carrie quitandole importancia.

Lysandro lanzó un vistazo hacia dónde se encontraba su amigo, aparentemente pasando un buen rato con un puñado de grupis y una pila de latas de cerveza.

-No te lo tomes a mal, ultimamente está un poco perdido -trato de excusarle el chico.

-¿Y cuando no lo ha estado? -suspiró Carrie - bueno, y, ¿ dónde está Violeta?

-Parece que ella también está pasando un buen rato -comentó Iris señalando con un ademán a una esquina del local.

Carrie se echo a reir al ver a Violeta colgada del cuello del batería del grupo. No parecía tan tímida como antaño.

Siguieron hablando entre ellos animadamente, comentando el concierto e ignorando el espectaculo cada vez mayor que estaban dando Castiel y sus fans, hasta que el vaso de Carrie voló de sus manos cuando una de las chicas que estaba con Castiel casi le cayó encima. No parecío importarle demasiado, ya que ni siquiera se molestó en pedir disculpas.

Lysandro contemplo la escena con el ceño fruncido y se acercó a Castiel con decisión.

-¿No crees que ya has tenido suficiente por hoy? -le reprendió severamente - Mira el espectaculo que estás dando, y encima delante de Iris y Carrie.

-No me conoces tan bien si piensas que me importa lo que esa piense de mí . No será ni la mitad de malo de lo que yo pienso de ella -escupió Castiel y se volvió a mirarla a los ojos - No es quién para darme lecciones de moralidad, ¿no?

Carrie ya había tenido suficiente. Se podía esperar que Castiel  no reaccionase precisamente bien al verla, pero eso ya era demasiado. Le daban ganas de gritarle que madurase, habían pasado cuatro años. Pero no iba a rebajarse a su nivel. Se disculpó con Iris y le pidio que se despidiera de Violeta por ella antes de salir del local.

No había dado ni  un par de pasos fuera cuando notó que alguien salía detrás de ella como un huracán.

-¡No puedes volver después de cuatro años  y esperar que todo vuelva a ser como antes! -vocifero Castiel - ¡Ya no significas nada para mí, si es que alguna vez hubo realmente algo!

-¡¿Y qué quieres?! ¡¿Qué te pida perdón?! ¡Lo siento, vale! -chilló ella en respuesta - La cagué, ¿estás contento? Tenía miedo y no sabía que hacer, era una cría y tú también. Y ahora dejame en paz y vuelve con tu amiga, que te estará esperando.

Carrie se dió la vuelta y se puso a caminar de nuevo, esta vez, nadie la siguió.