Kageyama's Harem (One Shots)

Celos ~ Tsukikage

El orgullo de Tsukishima era tan alto como su estatura o aún mayor, él nunca dejaría caer su orgullo por nada, a lo mucho por Yamaguchi en caso de que tuviera que defenderlo, pero hoy estaba apunto de dejar a un lado todo eso por una cosa: celos.

Hoy el equipo de Karasuno atendió un campamento de entrenamiento en Tokyo con Nekoma, Fukurodani e Inarazaki, cosa que no entusiasmó mucho al rubio ya que tenía que lidiar con más personas molestas y perdía mucho de su preciado tiempo fuera de la comodidad de su casa ahora convertido en un futón que estaría en un cuarto lleno de gente molesta.

Al llegar al lugar el equipo fué recibido por los capitanes de los respectivos equipos y les indicaron dónde iban a dormir y podían cambiarse para entrenar.
Todo estaba bien hasta ahí por así decirlo, pero Tsukishima volteó hacía su lado inconscientemente y se topó con algo que calentó su sangre a niveles descomunales.
En su lado estaba Kageyama rodeado por los gemelos Miya y Suna, siendo Atsumu el más pegado al azabache abrazando su cintura como si fuera lo más casual del mundo.

Tsukishima estaba molesto, no entendía la razón de su estado pero sabía que aquellos cariños que los Miya y Suna tenían con su setter estaban metiéndose en su piel.

Después de dejar sus pertenencias en su cuarto asignado y cambiarse para practicar, Tsukishima miraba de vez en cuando a Kageyama tratando de percibir algún cambio o detalle en su actitud, capaz y Kageyama tenía algo que ver con ellos y él se estaba metiendo en aguas turbias, pero tenía que saber algo.
Para su buena o mala suerte, ambos jóvenes se quedaron solos en el cuarto así que Tsukishima decidió tomar su oportunidad y sacarle la información que necesitaba del azabache.

-Oi, rey- llamó Tsukishima a Kageyama quién volteó a verlo irritado.

-¿Qué quieres?

-¿Desde cuándo eres tan cercano con esos plebeyos de Inarazaki?- preguntó burlón tratando de ocultar el tono molesto de su voz.

-¿Para qué quieres saberlo, poste con lentes?- preguntó Kageyama confundido.

-Curiosidad, se veían muy juntos cuando llegamos- Kageyama rodó los ojos y se acercó a la puerta.

-Somos amigos, idiota- respondió Kageyama tomando el pomo de la puerta, pero Tsukishima tomó su muñeca suavemente deteniéndolo por sorpresa.

-¿Seguro rey? ¿No son nada más?- preguntó Tsukishima con una sonrisa de lado acercando su rostro a Kageyama que se sonrojó con tal acto.

-¿Y a tí que te importa?
Kageyama abrió la puerta y se marchó de la habitación, dejando a Tsukishima con más dudas y una furia descomunal.

Al llegar a la cancha el Coach les informó que su partido de hoy serían contra Inarazaki, cosa que molestó al rubio.
Miró a Kageyama de reojo quien tenía una pequeña sonrisa en su rostro y miraba hacia el equipo rival, Tsukishima suspiró frustrado y empezó a calentar.

En el calentamiento Tsukishima se encontraba hablando con Yamaguchi de trivialidades cuando vió a Kageyama siendo aproximado por los tres chicos de Inarazaki que antes estaban cariñosos con él, ahora ayudándolo a estirar y haciéndolo reír.
Tsukishima no era consciente de sus puños cerrados con fuerza a sus costados y la mirada amenazante que lanzaba hacia ese grupo, pero Yamaguchi lo notó enseguida aún sin saber saber la razón de tal conducta decidió calmar a su amigo.