Kageyama's Harem (One Shots)

By Your Side ~ Kitakage

Una fiesta entre egresados de diferentes prefaturas de Japón que pertenecieron a sus respectivos equipos de Voleibol iba a darse en Shiratorizawa ese año.
Kazuyo quería volver a ver a sus antiguos compañeros y pasar un buen rato, pero había un obstáculo en el camino.

Los padres de Tobio como siempre están ausentes y Miwa está en Tokyo ya que va asistir a la universidad en breves, por lo cual no podía abandonar a su nieto solo en casa, a pesar de su madurez precoz y probablemente su gran capacidad de sobrevivir sólo, a Kazuyo le aterraba la idea de dejar su nieto sólo, es por ello que recurrió a una de sus antiguas amigas.

Kita Yumie era una mujer que vivía en Hyogo y estudió en la preparatoria de Fueneku. Tanto Kazuyo como Yumie compartían algo, tener un nieto serio que necesita de compañía.
Kita Shinsuke le llevaba 2 años a Kageyama Tobio, así que era el niñero ideal para cuidar del pequeño azabache mientras ambos abuelos se reunían con sus amigos.

-Es un placer verte de nuevo, Yumie- saludó Kazuyo a su amiga.

-Igualmente Kazuyo, ya casi te perdía el rastro- bromeó Yumie.

-¿Dónde está tu nieto?- preguntó Kazuyo.

Yumie se apartó un poco al lado y detrás de ella se podría ver a un joven de cabellos bicolor y ojos dorados que tenía una cara sería pero tímida.

-Vamos Shinsuke, preséntate con Kazuyo- pidió Yumie amablemente.

Kita miró a Kazuyo y dió una reverencia.

-Un gusto conocerlo, Kazuyo-san- dijo el menor Kita serio.

Kazuyo se rió con ternura y revolvió con cuidado los cabellos bicolores del joven.

-Gracias por venir a cuidar de mi nieto, el está en la sala viendo la televisión, si quieres ve que nosotros ya tendremos que irnos - comentó Kazuyo tomando sus cosas.

-Se bueno con Tobio, Shinsuke, te vendría bien otro amigo después de todo- dijo Yumie abrazando a su nieto.

-Deje curry para ambos en el refrigerador, volvemos en un rato- anunció Kazuyo que se marchó junto Yumie.

Kita miró por sus alrededores y buscó la sala dónde venía el sonido de lo que el supuso que era un partido de voleibol.
Solo unos metros bastaron para que Kita viera frente a él un chico de cabellos negros y ojos claros dónde se reflejaba con perfección el partido que miraba con mucha atención.

Kageyama no reparó en la presencia de Kita en ningún momento, su atención iba centrada completamente al partido que afortunadamente para el mayor acabó rápido, haciendo que el azabache volteara a un lado y se encontrara con él.

-Hola soy Kita Shinsuke, un placer- le saludó Kita junto con una reverencia.

-Un gusto, yo soy Kageyama Tobio- respondió Kageyama inmutado correspondiendo la reverencia.

Un silencio incómodo gobernó la sala hasta que Kageyama apagó la televisión y caminó hasta Kita.

-¿Quieres jugar voleibol?- preguntó Kageyama tímido.

Kita miró como las mejillas de Kageyama rápidamente se cubrieron por una amplia variedad de colores rojos con aquella pregunta, sintiendo un cosquilleo en su abdomen.
Kita asintió y Kageyama lo jaló de la mano hasta el patio.

La mano de Kageyama aunque fuera más pequeña que la suya era firme pero suave, Kita miró el agarre que ambos tenían hasta que el menor lo soltó para ir por su pelota.

-¿Qué posición te gusta?- le preguntó Kageyama animado.

-Me gusta ser Spiker, pero también me gusta recibir.