幽灵 BOSS | Jefe Espíritu [Completa]

Capítulo 60: Cita (3)

Todos tenían su propia manera de sobrevivir y no todos querían ser agresivos, altaneros y pisotear a los demás.

Wang XiaoMing pensó que debía usar esa frase como respuesta, pero abrió y cerró la boca varias veces; cada vez que se armaba de valor para hacer esa declaración, su mirada se posaba en los ojos brillantes de Baal y éste desviaba la mirada. Entonces Wang XiaoMing bajó la cabeza y disfrutó de esa inexplicable sensación de dulzura que crecía en su interior.

"¿No dijiste que querías tener una cita?" Baal observó el modo en que la cabeza de Wang XiaoMing se balanceaba hacia arriba y hacia abajo, como si el hombre estuviera inmerso en su propio mundo. Baal se sintió bastante molesto al pensar que Wang XiaoMing lo estaba ignorando.

Wang XiaoMing se rascó el cuero cabelludo. "Tú... ¿quieres dar un paseo en barco?"

Las cejas de Baal se arquearon.

Wang XiaoMing se dio cuenta del poco entusiasmo que mostraba Baal y dio una palmada, sugiriendo, "¿Por qué no vamos al gimnasio?". Ya que a Baal le gustaban tanto los juegos, tal vez también le gustaría hacer ejercicio.

Como era de esperar, Baal se animó y preguntó, "¿Qué se hace allí?"

"¡Ejercicio!"

En realidad, Wang XiaoMing rara vez iba al gimnasio. La última vez había sido para el partido de baloncesto de hace medio año entre su universidad y otra escuela. Chang HaiTao había sido un jugador clave en ese entonces y todos sus compañeros habían ido a ser animadores.

Wang XiaoMing había olvidado hace tiempo qué ruta de autobús público había tomado en aquel momento.

Wang XiaoMing sacó generosamente un billete de veinte yuanes para la tarifa del taxi.

Cuando llegaron, sus ojos miraron el taxímetro -- ￥32.50

Wang XiaoMing sacó el dinero como si se estuviera afeitando la piel y luego entró en el gimnasio con la cabeza alta y el pecho inflado.

Una joven con ropa holgada estaba junto a la puerta y lo saludó en cuanto lo vio. Le entregó un volante y le preguntó, "Señor, ¿le interesaría apuntarse a clases de taekwondo?

Wang XiaoMing estaba realmente interesado en el taekwondo.

En el corazón de todos, vivía un superhéroe que era capaz de todo y podía impartir justicia. Sólo que en Occidente llevaba una capa y ropa interior hacia fuera y volaba orgulloso entre los rascacielos. En Oriente, empuñaba una espada y caminaba solo hacia el sol poniente.

Todos los volantes promocionales tenían la misma característica: la exageración. Caminar se convertía en correr, correr se convertía en volar, volar se convertía en invisibilidad... básicamente, se enganchaba a la psique del comprador y hacía todo lo posible por meterse en ese punto dulce. Si era un punto dulce para gastar dinero o para ahuyentar a la gente, eso dependía de la persona.

Wang XiaoMing se dejó deslumbrar por las exuberantes afirmaciones, pero al final la matrícula echó un cubo de agua fría sobre sus esperanzas.

Un año, dos mil seiscientos cuarenta y ocho yuanes.

Medio año mil ochocientos ochenta y ocho.

Tres meses, seiscientos ochenta y ocho.

Un mes, precio promocional, doscientos cincuenta.

Ese no era el punto principal. El punto principal era que -- sólo serían cuatro lecciones al mes, lo que significaba que cada lección costaría alrededor de sesenta yuanes.

Wang XiaoMing preguntó, "¿Son clases individuales?" Si ese era el caso, la tarifa de la tutoría no era cara.

La joven sonrió y respondió, "Es un vaso grande, así que hay una docena de personas. Muy animado y no te sentirás solo".