CAP 6

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-Señor, eeehm... ¿Cómo se lo digo, sabe que con todo lo que nos ha contado, ya iría a la cárcel?- dijo Frank

-Ah, si, lo se.- dijo William tranquilo.

-No lo entiendo.- dijo Frank mientras negaba con la cabeza.

-¿El que?- preguntó William.

-Su serenidad.- dijo el teniente

-¿Mi serenidad, a que se refiere?- preguntó William ladeando un poco la cabeza.

-Acaba de contar... bueno más bien resumir, un asesinado doble con tranquilidad y una sonrisa.
¿ Cómo puede estar tan tranquilo, ¿sabiendo que lo pueden, mejor dicho, que lo VAN a ejecutar?- preguntó Frank.

-Estoy tranquilo por que la vida ya me ha dado mi escarmiento, el karma me ha castigado y sé que me merezco el infierno y es allí adónde voy ha ir, claro, si es que el diablo no me saca a patadas- dijo Afton para después reír.

-Vaya ¿Es usted creyente?- preguntó algo interesado Frank, quería toda la información posible sobre aquel hombre.

-Yo ahora mismo creo en todo...- contestó riendo un poco

-¿Motivo?- preguntó Frank curioso.

-¿Quiere saber algo sobre los niños o no?- preguntó Afton cortante.

-Por supuesto, pero es que estamos descubriendo tantos misterios- dijo el teniente llevandose una mano a la cabeza.

-Demasiados, en verdad, yo preferiría no haber escuchado o visto algunas cosas.-dijo Peter arrepentido.

-Bueno, eres joven, seguramente te acostumbrarás estando en este trabajo- dijo William con una sonrisa tratando de parecer amable.

El joven miró al hombre frente a él con duda.

-¿ Sabe que? Escuchando lo que he escuchado, dudo que esa sonrisa sea real.- dijo desconfiado.

William rió

-No, mi sonrisa, en esta ocasión, es totalmente real y sincera.- dijo sonriendo.

-Ya...- Peter no confiaba.

-Mira Peter- el mayor fue interrumpido.

-Vaya, ha dicho bien mi nombre...- dijo Peter con cierta alegría.

-Lo hice por jod*r, volviendo a lo que decía....puede que sea una persona horrible, un mal padre, un asesino, un monstruo...pero en el fondo, muy en el fondo, en un lugar tan profundo como las fosas de las Marianas, tengo un pequeño y diminuto corazón y a veces, muy pocas veces, vamos, que es más probable que te toque la lotería, tengo piedad y soy comprensivo- dijo William amable.

-Vaya, entonces, ¿Por qué no me ha tocado la lotería?- preguntó Peter.

- ... ¿Eres tonto o te lo haces? ¡Es una metáfora muchacho!- dijo William con fastidio.

-Sr. Afton, se que me voy ha arrepentir pero, continúe y dejé de irse por las ramas- dijo Frank.


-Oh, claro, ¿ Con detalles o sin detalles?- dijo William con una sonrisa algo retorcida.

-¿Que tipo de detalles...?- preguntó Peter no muy confiado.

-Sorpresa, sorpresa...

-Uuuf... Con detalles... "Ya me estoy arripintiendo..."- pensó Frank.

Tarde de 1985.

Era una tarde lluviosa y ya había anochecido. Fuertes truenos sonaban y relámpagos iluminaban el oscuro cielo.
Un viento fuerte arrastraba las hojas ya caídas de los árboles en aquel otoño.

Un coche morado conducía hacia la pizzería Freddy's. Afuera, una niña lloraba, víctima de una broma de sus 'amigos', la pequeña estaba asustada y trataba de entrar en el establecimiento.

Su 'protectora' Puppet la cual era una marioneta, la habría ayudado ha entrar, si no fuera por qué el mecanismo de su caja musical quedó bloqueado y no se pudó abrir, dejándola atrapada.

La niña golpeaba la ventana, pidiendo que la dejarán entrar. Pero los niños del interior se reían de ella y la ignoraban

Dejó de llorar cuando tras ella escuchó una voz familiar.

-Charlie...

La pequeña se giró y vio a un hombre tras ella, algo cerca. De inmediato salto a sus brazo con lágrimas es sus ojos.

-¡Tío William!- dijo Charlie abrazándolo- n-no me dejan entrar, se están portando mal conmigo.

El hombre estaba serio, sin formular ninguna palabra y sin corresponder el abrazo.

-¿Tío Will?¿Que te pasa?- dijo la pequeña apartándose un poco y tomando al hombre de los cachetes para mirarle a los ojos- ¿Te sientes bien tío? Te ves mal... ¿Necesitas otro abrazo?- preguntó inocente la niña con una sonrisa.

William seguía en silencio, lentamente sacó un cuchillo de su bolsillo, lo cual asustó a la pequeña. Esta sacudió levemente su cabeza hacia los laterales, el no le iba ha hacer daño, era amigo de su padre, la quería y siempre se había portado bien con ella, hasta llegaron a tener juntos momentos divertidos.
Tan solo sería una broma de su tío, una oscura y sádica broma.

El mayor no cambiaba su actitud, la miraba serio, como si sus ojos llegarán hasta el alma de la pequeña y leyera cada uno de sus sentimientos y pequeños sueños.

Se acercó más a ella.
Como por instinto, Charlie retrocedió. Antes de dar un pasó más, William miró a su alrededor, estaban en un callejón y no había nadie, claro.
¿Que clase de idiota estaría fuera con un tiempo así?

Cuando se aseguró de que no había nadie, tomó a Charlie del cuello y se la llevó a la parte oscura del callejón, donde empezó a estrangularla.

- T-tio...- dijo la niña con el poco aire que le quedaba.

Veía borroso al hombre frente a ella, al cual le había entregado su confianza, sus historias, sus anécdotas, sus sueños...
El mismo estaba destruyendo todo ello.

Sintió un filo en su cuello y un profundo desgarre en la garganta, en ese momento, todo se volvió negro.




Según Purple GuyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora