My Sweet Dad

Capitulo 6

Narra Tom

Estaba en casa de mis padres ayudando con la mesa, ya que era una pequeña reunión familiar. Mis hermanos estaban con Kiara en la sala mientras yo ayudaba a mi mamá.

—Niki: Harry me dijo que pasas mucho tiempo con la vecina —dijo sin despegar la vista del puré para mi hija—.

—Tom: Solo es una amiga —dije encogiéndome de hombros—.

—Niki: Claro, una amiga con la que siempre vas al parque con Kiara —dice sarcásticamente—. A mí no me ocultas nada, cariño —salió de la cocina con una sonrisa. Era verdad, no podía mentirle a mi mamá.

Llegué a un lado de mis hermanos.

—Paddy: Cada día está más grande —me entrega a mi hija en brazos—.

—Tom: Voy a llorar de tanto que me recuerdan —nos acercamos a la mesa y senté a mi princesa en mi regazo, pero mi celular vibra en la mesa. Era un mensaje de T/N sobre la sesión de fotos que le prometí de Kiara—.

—Harry: Está sonriendo como idiota —lo fulmino con la mirada—.

—Niki: ¿Quién es, cariño?

—Tom: La... fotógrafa de mi última sesión... Le prometí una sesión para Kiara —dije apenado. Aquí viene la emoción de mi mamá—.

—Harry: Ya me reemplazó —dijo fingiendo llorar—.

—Nikki: A nadie lo has dejado fotografiar a Kiara, cariño —dijo con una gran sonrisa—.

—Tom: Lo sé, mamá, lo sé, pero... es buena persona —abrí la comida de mi niña para que empiece a comer. Mi mamá me miró con esperanzas de que le diera más información de T/N; suspiré con una sonrisa—. Se llama T/N, es de ____ y trabaja en una revista. Y es la nueva vecina, ¿feliz? —comencé a darle de comer a Kiara—.

—Dominic: ¿Es la misma chica del parque?

—Tom: ¿Cómo saben que es la chica del parque? —dije mirando a mis hermanos, y los gemelos miraron a Paddy. Este se sonrojó—. Paddy...

—Paddy: Es que antes de que nos fuéramos te veías muy feliz con ella, perdón —dijo bajando la mirada. Paddy se encariñó mucho con Raquel y se decepcionó mucho cuando se enteró de que nos había dejado—.

—Tom: Está bien, campeón —dije con una sonrisa—.

—Nikki: ¿Y dices que es buena chica? —me harán un interrogatorio, esto durará bastante—.

—Tom: Sí, de hecho... ¿ves que te dije que tendríamos que llevar a Kiara al pediatra ya que empezaba con molestias en las encías? —Mi mamá asintió—. Bueno, un día antes había entrado en pánico porque no dejaba de llorar y fui con ella. Me dijo que estaba con sus primeros dientecitos, le colocó un poco de helado y Kiara se tranquilizó —me encogí de hombros—.

—Dominic: Buena persona y buena con los niños —dijo susurrando a mi mamá con las cejas alzadas—.

—Tom: Papá —reproché divertido—.

—Dominic: Solo comento —dijo encogiéndose de hombros—.

Narra T/N

Estacioné mi auto en el cajón que me correspondía del edificio y, al apagar el motor, di un gran suspiro y pasé mis manos por mi cara. Me quedé en esa posición durante varios minutos y, cuando respiré fuertemente, polvo entró a mi nariz.

—T/N: Mierda —tomé un pañuelo cuando comencé a toser fuertemente—. Creo que hoy no es mi día —salí del auto y abrí mi cajuela, donde tenía mi bolso y mi cámara. Pedí el elevador, pero al abrirse las puertas me encontré con Tom—.

—Tom: T/N, hola... ¿Qué te pasó? —me miró sorprendido y acarició las bolsas de mis ojos hinchados—. ¿Estuviste llorando? —negué con la cabeza—. No eres buena mentirosa —dice con una sonrisa.

—T/N: Lo sé, yo... —desvié la mirada—. ¿Dónde está Kiara? —dije al no ver a la pequeña por aquí—.

—Tom: Mi mamá quiso que tuvieran una tarde de chicas —se encogió de hombros—. Pero no te dejaré subir hasta que me cuentes qué pasó para que tengas los ojos hinchados —pasó su brazo por mis hombros y me hizo caminar a su camioneta—.

—T/N: Tom, no es necesario —traté de regresar al elevador pero no lo permitió. Suspiré cuando me di cuenta de que no me dejaría en paz. Me subí al auto y, tras un momento de silencio, llegamos a una cafetería. Nos dirigimos al fondo del local para tener más privacidad después de lo que ocurrió con los paparazzi—.

—Tom: ¿Qué vas a querer?

—T/N: No tengo hambre —susurré—.

—Tom: Venga, algo pequeño —lo miré resignada—.

—T/N: Un mocaccino —asintió y fue a pedir nuestra orden. Minutos más tarde volvió con las bebidas—. Tom, ¿qué hacemos aquí? —dije recargando mi cabeza en la mesa y escondí mis manos dentro de mi sudadera—.

—Tom: Porque estás triste —lo miré con los ojos entrecerrados sin despegar mi cabeza de la mesa y él me sonreía levemente—. Y quiero saber qué pasó para que esos hermosos ojos dejen de irradiar la alegría de siempre.

—T/N: No es que siempre tengan alegría...

—Tom: T/N... —reprochó, y yo suspiré—.

—T/N: Hoy fue el cumpleaños de mi papá. Técnicamente, en mi país fue ayer porque ya es de madrugada allá —terminé de decir sin mirarlo a los ojos—. Hoy fue su cumpleaños y, aunque solo lo celebrábamos los dos, siempre lo celebrábamos juntos de alguna forma. Y solo poder escuchar su voz... —mis ojos se llenaron de lágrimas y pasé mi brazo por ellos de forma furiosa—. Mi sueño siempre había sido vivir fuera del país, pero... jamás creí que fuera tan difícil.

—Tom: Sé que es difícil, T/N, y es normal extrañarlo —puso sus manos sobre las mías, provocándome un escalofrío.

—T/N: ¿Lo dices por experiencia? —asintió—.

—Tom: Pero pienso que lo más difícil será cuando tenga que irme a las grabaciones y tener que dejar a Kiara.

—T/N: Separarte de tu pequeña —sonreí levemente—. Mi papá tuvo ese mismo miedo, pero ahora cada vez que lo llamo se siente feliz de que cumpla mis sueños.

—Tom: ¿Más tranquila? —asentí—.

—T/N: Una cosa más —me miró atentamente—. Yo personalmente te mostraré a Kiara a través de la pantalla, aunque sea eso —me regaló una sonrisa—.

Holaaaaaa

Solo quería decirles las edades de los chicos:

—Tom: 22
—Harry: 20
—Sam: 20
—Paddy: 13