My Sweet Dad

"Capítulo 11"

Días después

Narra T/N

Me encontraba tomando una sesión con Elizabeth Olsen y Mark Ruffalo.

—T/N: Bien chicos, unas cuantas más y podrán ser libres —dije mientras seguía fotografiándolos. Duré así unos minutos cuando Sam llegó al estudio—. Hola —me miró apenado—. ¿Qué ocurre?

—Sam: La estilista de Tom está enferma y no va a poder venir, y los otros estilistas están ocupados.

—T/N: Ya voy —dije con una sonrisa—. Pueden irse chicos —asintieron y salieron del estudio. Me dirigí al camerino de Tom, toqué dos veces.

—Tom: Adelante —dice del otro lado. Abro la puerta encontrándome a Tom con sus brazos sobre las rodillas y una mano en su cabello—. Ah, veo que mi hermano me hizo caso —dice divertido. Me encojo de hombros.

—T/N: Me dijo que necesitabas ayuda, aunque no sé nada de maquillaje profesional —me regala una sonrisa.

—Tom: No te preocupes, solo es lo más simple —me acerco a él y tomo del tocador el iluminador y una brocha. Veo detalladamente a Tom: tenía unas grandes ojeras y bolsas debajo de los ojos.

—T/N: ¿Y para esto el maquillaje? —abro el polvo y aplico poco en la brocha. Tom baja la cabeza, lo tomo de la barbilla y lo obligo a verme—. ¿Qué ocurre? —comienzo a extender el iluminador por su nariz.

—Tom: Solo no he conciliado el sueño —se encoge de hombros.

—T/N: Eso no es verdad —tomé el cepillo y peiné sus rizos.

—Tom: No he tenido tiempo para estar con Kiara, ni siquiera la vi ayer —dijo desanimado—. No me quiero imaginar cómo estaré sin verla por casi un mes entero.

—T/N: Eso ya lo hablamos —dije divertida, y él rió—. Yo... si estás de acuerdo, yo me puedo hacer cargo de la pequeña —sabía que me reclamaría, pero lo interrumpí—. No es ninguna molestia —dije con una sonrisa.

Se levantó, provocando que quedáramos a centímetros de nuestros rostros, sintiendo nuestras respiraciones.

—Tom: Gracias —susurra mientras me mira directamente a los ojos y baja la mirada a mis labios, pero vuelve a mirarme.

—T/N: Y-yo... tengo que volver al estudio —tartamudeé mientras Tom acariciaba mi pómulo con su nariz.

—Tom: Pueden espe...

La puerta fue abruptamente abierta, provocando que diera un salto en mi lugar, separándome un poco de Tom.

—Harry: Tom, necesito a T/N en la cámara, y te necesitan en escena en 4 minutos.

—T/N: Y-yo... ya me voy —le sonreí a Tom y, con la respiración entrecortada, salgo rápidamente.

Hoy tenía que regresar a Londres, ya que los días libres de mi trabajo estaban por terminar. Tom estuvo de acuerdo en dejar que Kiara me acompañara. También se ofreció en llevarnos al aeropuerto.

—T/N: Nos vemos en un mes —dije con una sonrisa, pero Tom activó los seguros, impidiéndome salir—. ¿Tom? Voy a perder el vuelo —me miró con una sonrisa.

—Tom: Gracias por cuidar a Kiara.

—T/N: Ya me agradeciste como cien veces —estaba nervioso—. Estás nervioso desde que subiste al auto.

—Tom: Es que me siento culpable de que solo vas a estar cuidando a Kiara. ¿Segura que no tienes inconveniente con tu trabajo?

—T/N: Tom, ya nos pusimos de acuerdo. Harrison me ayudará mientras yo estoy en la oficina, ya que prácticamente nada más tengo 4 horas de trabajo, y al regresar a casa, yo me encargo de la pequeña —me miró con una mueca—. Venga, si no, perderé el vuelo.