CAPÍTULO 14

379 28 0
                                    

7/10

Ezosi

Silvia es igual a mi mujer. Las dos son tercas también tienen unos carácteres que ninguna persona aguanta, no comprendo porque Anaut y yo amamos a esa clase de mujer, al final del día no me arrepiento de tener a mi dulce Selene.

Escucho que suena mi teléfono, la pantalla está el nombre de mi mujer, contesto enseguida el teléfono.

— Cariño ¿qué sucede? — pregunto preocupado al escuchar que solloza y no me habla.

— No encuentro a Alton por ninguna parte — dice con rapidez.

Carajo.

— Tengo miedo ¿Y si le pasó algo? — habla con un tono entrecortado.

— Llamaré a Seth para ver sino está con el club de Killian ¿De acuerdo? — trato de calmar a mi esposa, siento que algo patea mi asiento y abro los ojos con asombro al encontrar a mi hijo con una sonrisa en el rostro.

— Encontré a Alton — informo a mi esposa mientras observo a Alton.

— Ese niño está en serios problemas por preocuparme — dice entre dientes, hablamos los dos por un rato más y colgamos, veo a mi hijo quién está arrepentido por lo sucedido, baja la cabeza esperando que venga una regañada.

— Solo quería acompañarte para ver al Tío Anaut — murmura y suspiro.

Está preocupado por su tío. No quiero llevarlo al hospital es muy peligroso para él porque puede contagiarse de cualquier enfermedad.

— No puedo llevarte al hospital, hijo, estás muy chiquito y puedes enfermarte — explico, asiente varias veces con la cabeza.

— Nos iremos al club, te disculparas con tu madre por haberte escapado así y después vemos que hacemos ¿De acuerdo?  — hablo, de nuevo asiente con la cabeza con tristeza.

No caigas, Ezosi.

Horas mas tarde...

Mi hijo se llevó una buena regañada por parte de mi esposa y esta castigado por una semana. Por otro lado, Barty está siendo atendido por el doctor en su habitación y su hermana lo acompaña. 

Tocan la puerta de mi oficina, abren y me encuentro con Silvia.

— ¿Qué pasa? — pregunto confundido.

— Quiero ver a Anaut, Ezosi — acota y abro mis ojos asombrado.

— ¿Estás segura? — cuestiono con cautela y asiente pensativa.

— Entonces vamos al hospital, Betiri me envió un mensaje para irme — hablo mientras me levanto de la silla y veo mi teléfono, nos dirigimos hasta la salida del club pero antes comento a mi esposa que voy a ir al hospital un rato.

— Cuídate mucho, cariño — es lo único que dice y besa mis labios.

Silvia

Minutos más tarde...

Llegamos al hospital, persigo a Ezosi quien se detiene y observa a una persona totalmente desconocida para mí.

— ¿Por qué está aquí? — pregunta para el mismo, pero logro conocer al hombre, niego varias veces mi cabeza

El no puede estar aquí ¿Por qué está aquí?

Agarro el chaleco de Ezosi, siento que soy una niña pequeña en estos momentos. El presidente se aleja y  pero apresura sus pasos para ir junto al hombre que me hizo tanto daño. Da un golpe en su rostro, me tapo la boca para no emitir ningún sonido.

Cierro mis ojos con fuerza porque los recuerdos del pasado cuando mi tío me maltrataba vienen a mí.

Tienes que ser fuerte, Silvia.
Abre los ojos, Silvia.

Siento que alguien me abraza, siento que alguien me habla al oído.

— Ya pasó, Sil, abre los ojos  — murmura Betiri en mi oído, poco a poco mis ojos, miro a mi alrededor buscando a mi tío.

— Ese hombre no se acercará a tí. No está aquí, tranquila — dice Ezosi con un tono suave.

— ¿Quieres entrar junto a Anaut? — pregunta con suavidad y asiento varias veces.

Espero que el hombre que está adentro de esta habitación sea la persona que me enseñe a amar también que los dos podemos superar juntos nuestro pasado.

***

Me tardé mucho, lo siento.

Este fin de semana prometo finalizar este maratón.

¿Que habrá pasado con Silvia? ¿Cuál es su historia?

¿El tío de ella está involucrado con Jafet?

Tantas preguntas tenemos que descubriremos pronto.

Cruel Atracción (#2 MC W.K.) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora